Me empieza a dar coraje verte los lunes a esta hora. No es ni pronto ni tarde, pero las penas son las mismas. -Una hora magnífica. No sabes si pedir una tostá de manteca colorá o de melva y morrón. -De eso también depende el acompañamiento para tragar. -Absolutamente. -Hablando de tragar, ya no me jode el Betis un sábado a mediodía más. -Alguno creo que te puede quedar... -¡Qué no! Que ya no lo veo más un sábado a esa hora. Me sentó hasta la comida malamente y perdí el día con el mosqueo. -Eso sería que comiste marisco. -Me comí lo que me salió del alma. No te arranques que vosotros no dejasteis ni el rastro de la...
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