Musk tiene ‘otros datos’: DOGE dice que recortó 55 mil mdd de gastos, pero las cifras muestran menos
El esfuerzo de reducción de costos federales, denominado Departamento de Eficiencia Gubernamental, a cargo de Elon Musk, dice que ha ahorrado 55 mil millones de dólares en gastos federales hasta ahora, pero su sitio web solo da cuenta de 16.6 mil millones de esa cantidad.
Y eso sin tener en cuenta un error en los datos publicados en el sitio web de DOGE, que etiqueta incorrectamente un contrato como de 8 mil millones de dólares, que luego se corrigió en la base de datos federal y que solo era de 8 millones de dólares. Eso reduce casi a la mitad el total de los ahorros detallados de DOGE.
Elon Musk, aliado cercano del presidente Donald Trump, ha prometido que la empresa amorfa de reducción de costos brindará “máxima transparencia”.
Pero la contabilidad de DOGE plantea interrogantes sobre la fiabilidad de sus propios informes y su nivel de rendición de cuentas. A pesar de su nombre, no es un departamento, sino una oficina dentro de la Casa Blanca que opera fuera de la mirada de los organismos de control federales tradicionales, incluidos los inspectores generales.
El papel de Musk en la empresa también ha suscitado dudas sobre conflictos de intereses. Su empresa SpaceX ha recibido miles de millones de dólares en contratos federales. Trump ha dicho que Musk se vigilará a sí mismo si hay conflictos relacionados con las seis empresas que dirige. El empresario multimillonario está obligado a presentar una declaración financiera federal, pero no se hará pública.
En su sitio web, donde se detallan los ahorros enumerados, DOGE dice que está trabajando para cargar todos los datos “de una manera digerible y totalmente transparente, con suposiciones claras, en consonancia con las normas y regulaciones aplicables”. Algunos avisos de rescisión final de contratos también pueden tener un retraso de hasta un mes antes de ser publicados, dijo.
Musk, hablando con periodistas en la Oficina Oval la semana pasada, dijo que algunas de las cosas que dice “serán incorrectas y deberían corregirse”, y agregó que DOGE actuaría rápidamente para corregir los errores.
DOGE ha actuado rápidamente a través del gobierno federal, cancelando contratos y despidiendo a miles de empleados en todas las agencias, y en ocasiones recontratando rápidamente a empleados que acababan de ser despedidos.
Su trabajo ha estado envuelto en gran medida en secreto sobre quién está involucrado y qué están haciendo. En una presentación judicial esta semana, la administración Trump afirmó que Musk no trabaja para DOGE, sino que reporta directamente al presidente, una medida que lo protegería de algunas leyes de transparencia.
‘Muy buen comienzo’
El martes, un juez federal denegó una solicitud para prohibir temporalmente a los equipos de DOGE acceder a los sistemas internos del gobierno y eliminar empleados de las agencias estadounidenses, lo que le dio a Trump una victoria en una de sus iniciativas emblemáticas.
El fallo rechazó una solicitud de intervención judicial inmediata por parte de los fiscales generales estatales demócratas que sostienen que Musk está ejerciendo un poder para remodelar el gobierno de Estados Unidos, que se supone está reservado solo para funcionarios de alto nivel confirmados por el Senado.
La administración Trump ha elogiado el esfuerzo de Musk y ha indicado que hay mucho más en camino.
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, se hizo eco de las afirmaciones de que DOGE había encontrado un ahorro estimado de 50 mil millones de dólares hasta el momento, en una entrevista con Fox News el martes, y lo calificó como un “muy buen comienzo”.
En una aparición conjunta con Musk y el presentador de Fox News, Sean Hannity, que se emitió el martes, Trump dijo que el esfuerzo de Musk es “encontrar miles de millones, y serán cientos de miles de millones de dólares en fraude”. Musk, por su parte, reiteró su objetivo general de reducir el déficit en un billón de dólares.
Sin embargo, no está claro cómo DOGE llegaría a esas sumas incluso con recortes profundos, especialmente porque Trump ha prometido que no tocará los programas de Seguridad Social, Medicare y Medicaid.
El gasto discrecional de Estados Unidos asciende a unos 1.8 billones de dólares anuales, de los cuales casi la mitad corresponde a gastos militares. DOGE tiene previsto empezar a considerar al Departamento de Defensa entre sus próximos objetivos de revisión.