El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, remitió ayer una nueva carta al ministra de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente , para solicitarle el proyecto de ampliación y renovación de la estación de trenes de Campo Grande , que tiene un presupuesto de 253 millones de euros (IVA no incluido). «A partir de ahí tomaré decisiones», dijo el regidor ante la posibilidad de que sea incompatible con el soterramiento de las vías, algo que garantizó defenderá «hasta la extenuación. Que nadie lo dude», remarcó. Carnero, que visitó las obras de una promoción de vivienda pública destinada al 'cohousing', avanzó que acababa de remitir una misiva al ministro porque han conocido los detalles del proyecto de la estación de forma «fascicular», como el informe del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) que señala que esta obra es incompatible con el soterramiento, ya que exigiría demoler la nueva terminal que sobrevuela las vías, cuya licitación autorizó el martes el Consejo de Ministros, informa Ical. En ese sentido, el alcalde de Valladolid, que asistió el pasado lunes a la presentación del proyecto de la nueva estación en superficie, aseguró que le «sorprende muchísimo» que Puente haya planteado una obra que impida el soterramiento porque «aprecia mucho a Valladolid». «Estoy convencido que no puede estar en esa dinámica, no puede estar en esa óptica», agregó Carnero, que va a convocar a la Mesa del Soterramiento. Asimismo, insistió en que Valladolid «no demanda una estación de trenes», si bien apostilló que «bienvenida sea» si, además, es «regalada». « Valladolid lo que quiere es que la vía del tren esté soterrada . Eso es lo que nos dijeron los electores en mayo de 2023 y a esos me debo yo», insistió Carnero, Además, apuntó que entre lo que cuesta la integración y la estación, la desaparición de las vías en superficie «está al alcance de la mano». Por ello, garantizó que va a seguir defendiendo el soterramiento, si bien señaló que primero quiere conocer el proyecto. «A caballo regalado no le miro el diente. Ahora bien, este caballo no puede impedir el soterramiento en el medio y largo plazo. No lo puede impedir porque eso sería de una injusticia tremenda con las generaciones venideras», insistió el regidor. Por otro lado, las asociaciones vecinales Pilarica y La Unión, de Pajarillos, calificaron ayer como «galáctica» la nueva infraestructura y denunciaron que mantiene el «muro de la vergüenza» que divide en dos la ciudad. En un comunicado, aunque reconocen que «mejorará la comodidad de los viajeros», consideran que el diseño y la inversión de 253 millones de euros se acercan al de una estación «espacial». «Más parecen un regalo destinado a deslumbrar al visitante por su diseño y servir de sustento para el ego dopado del ministro», concluyeron.