Aunque los métodos de pago digitales como las tarjetas , aplicaciones o relojes inteligentes se han extendido rápidamente en los últimos años, los pagos en efectivo no se han extinguido. Según el informe sobre uso del efectivo del Banco de España, este método de pago se utiliza sobre todo para pequeñas cantidades y en pequeños comercios. A pesar de eso, siempre hay personas que prefieren utilizar esta forma. No obstante, no se puede pagar todo con dinero en efectivo sino que Hacienda establece un límite para ello y obliga a los comercios a no aceptar cantidades superiores a él. El objetivo es evitar el fraude y el blanqueo de capitales. Este tope para los pagos en efectivo lo marca la Ley 11/2021 que, además, redujo el límite que antes se encontraba en los 2.500 euros . De acuerdo a esta norma, el límite de dinero que se puede pagar en efectivo en una tienda o establecimiento es de 1.000 euros . Hay que tener en cuenta que el tope es el mismo en el contravalor de una moneda extranjera. «Desde el punto de vista sustantivo, ha disminuido el límite general de pagos en efectivo de 2.500 a 1.000 euros y, en el caso de las personas físicas particulares con domicilio fiscal fuera de España, de 15.000 a 10.000 euros», señalan desde Hacienda. Además, una de las normas es que los pagos no se pueden fraccionar sino que la persona sólo podrá hacer un pago ya que el resto de cantidades se irán sumando y no se podrán superar más de 1.000 euros. Hacienda ha establecido un régimen sancionador donde se tendrá que abonar un 25% del total que se haya pagado en efectivo. Por ejemplo, si se pagan en efectivo 3.000 euros, habrá que afrontar una multa de 750 euros. Como informa la Agencia Tributaria estas multas «el procedimiento sancionador por los incumplimientos de las limitaciones a los pagos en efectivo se regula por la normativa administrativa sancionadora común, en vez de por la normativa tributaria, dado que no se trata de un incumplimiento tributario, sino financiero».
