El
Abierto de Mérida (México) vivió este domingo una final histórica, y no por el nivel de tenis de se vio en la pista. Tras la retirada por lesión de Paula Badosa en cuartos de final,
se jugaban el título la estadounidense Emma Navarro, primera favorita, y la colombiana Emiliana Arango, la gran sensación del torneo que aspiraba a dar la gran sorpresa.
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