Miércoles de Ceniza 2025: de qué está hecha y qué significa esta acto al comienzo de Cuaresma
La Cuaresma es uno de los periodos más importante de los cristianos, símbolo de reflexión y preparación para la llegada de Semana Santa y Pascua. Comienza el Miércoles de Ceniza (este 2025, en 5 de marzo, ya que cada año varía en función del ciclo lunar), que tiene lugar en la semana posterior al fin de semana de Carnaval. Un día en el que los creyentes acuden a misa y se le impone la ceniza en la frente. No es casualidad su procedencia, así como el por qué se realiza este acto, ya que tiene diversas razones.
En este día, los cristianos manifiestan arrepentimiento y deseo de conversión a Dios en este inicio de Cuaresma. Se trata de un día santo en el que cada cristiano debe hacer oración y ayuno, y marca el inicio de un periodo de reflexión y arrepentimiento que dura hasta Semana Santa.
Aunque la Biblia no detalla explícitamente este primer día de los cuarenta de preparación para la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo, hay muchos casos de este acto de arrepentimiento en el Antiguo Testamento. Su simbolismo a su vez, tiene que ver con los cuarenta días que Jesús pasó en el desierto en ayuno y oración, así como los cuarenta días que duró el Diluvio Universal en tiempos de Noé o los cuarenta años que el pueblo de Israel vagó por el desierto antes de entrar en la Tierra Prometida.
Miércoles de Ceniza 2025: significado, por qué se celebra y es tan importante y de dónde viene la ceniza que se echa para comenzar la Cuaresma
En este día tan especial, los cristianos se arrepienten de sus pescados, y la cruz de ceniza que marca la frente de los fieles representa la mortalidad y la penitencia por ellos. El sacerdote repite en este acto: "Recuerda que eres polvo y en polvo te convertirás" o también "arrepiéntete y cree en el Evangelio".
La imposición de las cenizas viene de una antigua tradición hebrea, cuando se cubrían con cenizas los judíos después de haber pecado o como preparación para algún acontecimiento señalado. Con esta práctica, pretendían acercarse más a Dios a través del arrepentimiento, lo que hace que las cenizas tengan un sentido simbólico de muerte, caducidad y humildad y penitencia.
Por otro lado, las cenizas que se utilizan proceden de la quema de las palmas y los ramos que han sido bendecidos el Domingo de Ramos del año anterior. Estas son rociadas con agua bendita y luego aromatizadas con incienso, por lo que se cierra el ciclo de simbolismo que rodea la Cuaresma y la Semana Santa para el cristianismo.