Vitrina Venezuela: Una estrategia para Venezuela (parte 3)
Continuando con los límites a la estrategia, después de los marcos normativos y el benchmarking, debe considerarse el entorno. Para construir un marco teórico sobre los acontecimientos en otros países resultará fundamental también poner los pies sobre la tierra, cuyas características pone cercos a la estrategia. La realidad y cómo es percibida condicionarán nuestra planificación.
La identidad tiene una dimensión individual y una social, que no siempre suelen coincidir. La primera incluye las evaluaciones que las personas hacen de sus vidas, teniendo como referentes sus experiencias emocionales –positivas o negativas–, la posibilidad que tienen de desarrollar potencialidades y crecimiento personal, además de las herramientas para afrontar los retos vitales y el esfuerzo por alcanzar sus metas.
La segunda, agrupa la valoración de las propias circunstancias y del funcionamiento de nuestra sociedad, lo que supone una evaluación de la relación de las personas con su entorno, así como el grado en que se sienten pertenecientes a esa comunidad de la aldea global.
Entonces, ¿qué identifica a Venezuela? ¿De qué forma construimos lo que nos define como nación? Cuando respondemos estas interrogantes resulta imposible separarse de nuestra identidad petrolera y de los indicadores socioeconómicos, tanto los “duros” como los “blandos”. ¿Somos algo más que mises, petróleo, telenovelas y Salto Ángel?
Desde 2014 hasta 2024 el país experimentó una caída promedio acumulada del Producto Interno Bruto del orden del 80%, una cifra más crítica que cualquier país en tiempos de guerra según el Fondo Monetario Internacional, sabiendo que no hay cifras oficiales y que lo que se hace es extrapolar valores que nos acerquen a números creíbles que sirvan para la toma de decisiones.
Con las reservas internacionales en el orden de los 6 mil millones para 2021 (un promedio de US$ 43 mil millones en 2010, 30.000 millones en 2013, 16.000 millones en 2017, y 8.800 millones en 2019); una tasa de desempleo general de 40,3% para 2021 con una informalidad muy alta, en medio de una caída en la población económicamente activa que representa una tasa de actividad del 53,8%.
Con una pobreza del “82,8 % de los hogares quedó en la categoría de pobres por ingreso (no contaron con el dinero suficiente para adquirir la canasta básica) y 51,9 % se ubicó en pobreza multidimensional” que tiene características de estructural, según lo publicado por Encovi.
A estos se suman los indicadores “blandos” que fueron evidenciando un continuo deterioro del clima socioemocional, asociado fundamentalmente a la presencia de situaciones concretas como la inflación con recesión, inseguridad y desabastecimiento, incidiendo en las percepciones y, por supuesto, en las conductas de los ciudadanos; capaces de desencadenar la generación de incidentes de gravedad que atenten contra la estabilidad social y la gobernabilidad.
Las categorías emocionales asociadas al enfado, preocupación, confusión, frustración y, especialmente, la tristeza, aumentaron en promedio 27 puntos porcentuales; mientras que las positivas, como satisfacción, confianza, tranquilidad, esperanza y felicidad se desplomaron en un porcentaje similar. Los resultados reflejaban una variación que rondaba entre los 20 y 40 puntos porcentuales en tan sólo seis meses y cuyos aumentos o descensos se traducían en una tendencia negativa que, desde ese punto, seguiría creciendo.
La estrategia no solo es el objetivo, norte estratégico o sentido de dirección, sino principalmente el camino que debe seguirse para lograrlos. Un camino lleno de obstáculos y sorpresas que solo puede ser superado contando con la fortaleza de la visión que se tenga, asi como de los valores y principios que se usen como referencia.
Si el sentido de dirección está claro, y al mando, la población se lo otorgó mayoritariamente a Edmundo y María Corina, ahora todo el tema está asociado a identificar los diferentes escenarios, sabiendo que hay situaciones como las fortalezas y debilidades que están 100% en manos internas, y que las amenazas y oportunidades están en manos de terceros.
Hoy en día, una parte de las decisiones está en manos del gobierno de Trump, y otra en manos de Edmu do y María Corina. Porque en el caso del chavismo, que está jugando en forma defensiva a fila cerrada y arrinconados, solo pueden operar en forma reactiva, tal como está ocurriendo. La época en la que llevaban la iniciativa mediática y la iniciativa política ya quedó atrás, y ya no podrán recuperarla.
Claro está, a menos que los dos factores de poder mencionados, muevan mal (voluntaria o involuntariamente) sus piezas y, tal como hizo el Papa en 2017, y Biden en 2022, les devuelva el oxígeno y los ancle en el poder por siempre jamás.
Perece mentira, pero todo depende la voluntad de poder de la dupla María Corina/ Edmundo… porque la vocación de poder del chavismo, especialmente de Diosdado, siempre estuvo muy clara y presente.
Noticias destacadas
- EEUU envió a más de 250 criminales del Tren de Aragua y la Mara Salvatrucha para ser encarcelados en El Salvador. El presidente salvadoreño Nayib Bukele informó que fueron trasladados al Centro de Reclusión para Terroristas por un período renovable de un año. El secretario de Estado norteamericano, Marco Rubio, agradeció la cooperación.
- El Mundo: Trump acusa a Maduro de patrocinar al «narcoterrorista» Cártel de los Soles y de haberse infiltrado en el Tren de Aragua. La Casa Blanca se refiere a Maduro como líder del Cartel de los Soles: lo acusa de operar con el Tren de Aragua.
- EFE: Trump invoca la Ley de Enemigos Extranjeros para deportar a miembros del Tren de Aragua. La orden ejecutiva de Trump subrayó que el Tren de Aragua (opera en conjunto con el Cartel de los Soles) «perpetra, intenta y amenaza con una invasión o incursión depredadora contra el territorio» y que pueden detener, retener y expulsar en calidad de enemigos extranjeros a todos los venezolanos mayores de 14 años que pertenezcan al mismo, se encuentren en Estados Unidos y no tengan condición de naturales o residentes permanentes legales.
- Tal Cual: Estados Unidos estudia prohibir entrada de venezolanos y de 42 nacionalidades más a su territorio.
- El País: María Corina Machado amplía su control de la oposición tras la renuncia de otro dirigente clave. La marcha de Omar Barboza, alejado de la líder, no acaba con las diferencias de criterio y la desconfianza entre sectores opositores.
- EFE: Otros dos alcaldes de una región en Venezuela son detenidos por presunto narcotráfico (guerra interna entre carteles).
- La Ceiba: Nuestro país es mayoritariamente honesto y decente. Los venezolanos somos trabajadores, bien dispuestos y siempre echados para delante, no importa el lugar donde nos encontremos. Por eso es doloroso ver cómo, por unos pocos forajidos, se pretende incluirnos en una lista negra y en sumarnos injustamente a una suerte de club de ciudadanos indeseables, en un país que sabemos amigo y cercano de nuestra causa.
- Cuba sufrió apagón general tras una falla en el Sistema Eléctrico Nacional.
- Extraditan a siete líderes de cárteles colombianos a USA: enviaban toneladas de droga a narcos mexicanos (los colombianos dejaron de ser los dueños del narco y fueron relegados a proveedores… el liderazgo ahora lo tiene México).
Lo que no fue noticia (y debería serlo)
- Que “las penurias de la población venezolana” no provienen de las sanciones, sino que, con o sin ellas, los fondos que recibe el chavismo nunca llegan al pueblo, sino que se quedan en el camino de la corrupción o la inversión en medios de represión, tortura y muerte, dentro y fuera del país. De hecho, el tema Chevron aún no ha comenzado, y la pensión de militares retirados es inferior a 1,5 dólares por mes; esto por dar solo un ejemplo de las “penurias” que viene sufriendo el pueblo venezolano desde hace años… Lo ideal sería que no hubiera sanciones… pero debe estar claro que no son en contra de Venezuela, sino del chavismo… que, en este caso, tristemente, coinciden.
- Ni que estamos asistiendo a la transición histórica de modelos obsoletos y hambreadores, con la casi segura caída de los gobiernos de Cuba, Nicaragua y Venezuela, que ya se respira en el ambiente. Es un desmoronamiento de las estructuras de esos países que terminarán como Cuba, sin luz, sin agua y sin comida… no por las sanciones, sino por su propio desempeño de despreciar el mantenimiento, la inversión y todo lo que significa mérito y hacer las cosas bien… es una cuestión de tiempo… sólo poco tiempo más
- O que intentar reducir el tema de las sanciones a Venezuela a una lucha corporativa entre Exxon y Chevron, es desconocer que ambas tienen mercados bien definidos en cuanto al tipo de proyectos que emprenden. Por el contrario, Chevron, compró Hess por 53.000 millones de dólares para tratar de entrar en Guyana, donde Exxon tiene el liderazgo… y, en estas condiciones, el mercado venezolano, carece de atractivo por la inseguridad jurídica y el perfil político que prima sobre todo lo que ocurre en el país. Claro que cuando cambien las cosas, allí realmente veremos cómo cada quien gana genuinamente su mercado sin tener que valerse de la cercanía ideológica con el chavismo… Ya en el Congreso de Estados Unidos, bautizaron al petróleo de Chevron como “barriles de sangre”.
- Tampoco que, sin descuidar la administración del capital de trabajo, el foco de las empresas en Venezuela debe estar en la protección del patrimonio que es lo único que les permitirá estar vivas luego del temporal que se viene. La tormenta estará impactando a finales del primer semestre con énfasis en la mitad del segundo semestre de 2025. Deben preparase y proteger la solidez del balance, preparando presupuestos bajo crisis… deben estar conscientes que tendremos altos niveles de inflación con una recesión profunda y con fallas largas en los servicios públicos… además de restricciones para el comercio internacional producto de la “máxima presión” que el gobierno de Trump está aplicando sobre el chavismo.
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