Caso Gene Hackman: hallan roedores muertos en la vivienda del fallecido actor
El Departamento de Salud de Nuevo México (EE.UU.) ha encontrado múltiples roedores muertos en varias dependencias de la vivienda en la que fallecieron el actor Gene Hackman y su esposa Betsy Arakawa, esta última a causa de hantavirus, que se contrae por exposición a excrementos de estos animales. Según recogen los medios estadounidenses, que citan un informe medioambiental de este departamento realizado en marzo, se han encontrado cadáveres y nidos de roedores en tres garajes, así como en dos pequeñas viviendas que están separadas de la propiedad y en tres cobertizos. Además, en uno de los garajes había un roedor vivo, de acuerdo con CNN. Las autoridades también avistaron roedores muertos, un nido y heces en dos vehículos que se encontraban en la propiedad, catalogados en el informe como "maquinaria agrícola" o como transportes "abandonados".
Arakawa y Hackman, que contrajeron matrimonio en 1991, fueron encontrados muertos en su aislada casa a las afueras de Santa Fe en febrero pasado. El médico forense estatal concluyó que Arakawa, de 65 años, falleció a causa de hantavirus, que puede causar síntomas parecidos a los de la gripe antes de progresar como una enfermedad respiratoria, así como insuficiencia cardíaca y pulmonar. Por su parte, Hackman, quien padecía Alzheimer, pasó una semana más en la casa conviviendo con el cadáver de su esposa antes de fallecer el 18 de febrero por una enfermedad cardíaca. El actor, leyenda de Hollywood durante varias décadas del siglo XX, ganó dos premios Óscar por sus icónicos personajes en "The French Connection" y "Unforgiven", y se convirtió en uno de los intérpretes más versátiles y populares de su generación.
Registros y grabaciones
La investigación continúa dando detalles sobre el caso Gene Hackman. Publica "The New York Times" que días antes de que Arakawa y su esposo fallecieran en su casa, ella buscó repetidamente en internet información sobre síntomas gripales y similares a los de la covid-19, según registros hechos públicos por las autoridades de Nuevo México.
Los registros -que incluyen entrevistas con testigos, fotografías del lugar de los hechos y grabaciones de la cámara corporal de la policía- proporcionaron nueva información sobre los últimos días de la pareja en su hogar, cerca de Santa Fe (Nuevo México), en el mes de febrero. Arakawa hizo búsquedas en Google un par de días antes de su muerte, con frases que incluían: "¿puede la COVID causar mareos?" y "gripe y hemorragia nasal".
También envió un correo electrónico a su masajista para cancelar una cita, escribiendo que su esposo se despertó esa mañana con síntomas similares a los de la gripe o el resfriado, pero que había dado negativo en la prueba de COVID. Ese mismo día, encargó bombonas de oxígeno para asistencia respiratoria. Los investigadores que acudieron al lugar encontraron a Hackman en el suelo del recibidor, en el extremo opuesto de la casa. "Mostraba signos de descomposición activa, incluyendo manos ennegrecidas con tejido dañado", escribió el detective Joel Cano en un informe publicado el martes, agrega The New York Times.
Una de las perras de la pareja, una kelpie australiana llamada Zinna, fue encontrada muerta en una jaula, donde se recuperaba de una cirugía de vesícula biliar y bazo. Un informe de un laboratorio veterinario determinó que la perra probablemente murió de deshidratación e inanición. Las imágenes de la habitación donde se encontró a Arakawa mostraban un mostrador lleno de pastillas, que se descubrió que no estaban relacionadas con su muerte.
La gravedad de los síntomas de la Arakawa antes de su muerte aún no está clara. De hecho el 11 de febrero, las imágenes de seguridad la mostraron visitando tiendas, incluyendo una de comida para mascotas y una de comestibles, con una mascarilla médica. Al día siguiente, llamó para programar una cita con un servicio médico ya que tenía síntomas de congestión, pero no se presentó. La autopsia reveló inflamación en sus pulmones. El médico forense a cargo del caso declaró que, dado que Hackman, quien dio negativo en la prueba de hantavirus, padecía Alzheimer avanzado, no estaba claro si sabía que su esposa había fallecido. No había indicios de que hubiera pedido ayuda, aclara el diario neoyorquino.