La propaganda iraní aumenta el miedo entre los israelíes
Los israelíes que se fueron a dormir el lunes, porque otros se quedan despiertos esperando, tuvieron una noche interrumpida por cuatro sirenas y, sin embargo, menos misiles que las tres noches anteriores. Tampoco hubo muertos, a pesar de los impactos directos, que los hubo.
Antes de que sonaran las primeras sirenas, varios mensajes de WhatsApp que corrieron como la pólvora, urgían a los israelíes a no ir a los refugios cuando sonasen las sirenas, otros advertían de ataques terroristas en los propios refugios.
Los mensajes falsos, que pronto se desvelaron como tales, lograron su objetivo de infundir aún más miedo y confusión por unos minutos, hasta que periodistas y portavoces del Comando del Frente Interno los desvelaron como ciberataques iraníes.
El día en Israel transcurre en una tranquilidad y silencio muy impropios del país, con los colegios cerrados, las guarderías también, las oficinas, los gimnasios, sin aviones y, en general, la vida entera, salvo los establecimientos indicados como “esenciales”, es decir, farmacias, supermercados, algunas tiendas de comunicación y, en Tel Aviv, algunas cafeterías y restaurantes que sirven a su clientela a través de los servicios de mensajería.
Salir de Israel en barco
En Tel Aviv muchos han abandonado la ciudad y han buscado refugio en ciudades que suponen menos interesantes para los misiles y drones de Teherán. En esta ciudad está el cuartel general del Ejército y Ministerio de Defensa y también otros complejos de inteligencia.
También hay israelíes que tratan de salir del país, a pesar de que el cielo esté cerrado. Algunos lo hacen a través de Jordania, por tierra, y otros en barcos, yates o veleros privados, que los llevan a Chipre en una travesía de unas 13 horas no particularmente cómoda.
Hay grupos de Facebook dedicados en estos días a ofrecer o informar sobre salidas marítimas desde varios puertos de Israel. La Autoridad de Población e Inmigración aún no ha podido evaluar la magnitud del fenómeno. Mientras, por segundo día consecutivo, Irán amenazó con ataques sin precedentes sobre Israel, con “métodos sofisticados e innovadores”.
Por de pronto, las instrucciones del Comando del Frente Interno han modificado el sistema de aviso de lanzamiento de misiles desde Irán. La información dice que Irán, en lugar de lanzar un gran número de misiles desde lanzaderas fijas, ahora está usando tres o cuatro lanzaderas móviles que disparan rápido y son evacuadas de la zona de lanzamiento de manera inmediata, lo cual reduce significativamente el tiempo para la detección temprana. A partir de hoy, si hay una alerta, se avisa a los ciudadanos que el posible impacto sería en diez minutos o menos.
El posible cambio de régimen en Irán
Tras cuatro días de guerra, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, se ha pronunciado tanto en la televisión estadounidense Fox, como en una rueda de prensa local, sobre la posibilidad de provocar un cambio de régimen en Irán. Además de detener el proyecto nuclear persa y diezmar sus miles de misiles.
Según el analista Chaim Levinson, la idea parece ser derrocar al régimen de los ayatolas que gobierna Irán desde 1979 y reemplazarlo por uno que ponga fin al programa nuclear por sí solo.
El analista señala que tras el ataque a la instalación nuclear de Natanz, la lista de objetivos que Israel ha atacado en las últimas 24 horas parece haber sido preparada por la oposición iraní y todos aquellos que aspiran a un cambio de régimen: la jefatura de policía, la dirección de inteligencia del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica y, finalmente, la cadena de televisión estatal.
Israel también espera, como sugirió Netanyahu en su rueda de prensa, el apoyo bélico en la defensa por parte de Francia y Reino Unido y un papel más activo de Estados Unidos.
Sin embargo, mientras que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ve los ataques israelíes como un medio para alcanzar un acuerdo nuclear, Israel ahora los percibe explícitamente como un precursor de la plena participación militar de EEUU y un cambio de régimen en Irán.