En la provincia de Jaén hay, ahora mismo y al menos, cinco niños y niñas de entre 0 y 6 años que necesitan una familia . No un centro, ni una solución temporal institucionan sino el calor de un hogar, un entorno acogedor, en definitiva, una familia. Por eso, la Asociación para la Promoción del Acogimiento Familiar en Andalucía (APRAF-A) ha lanzado un llamamiento urgente a la ciudadanía jiennense. Las coordinadoras del programa en la provincia, Natalia Prieto y Elena Sánchez, llaman directamente a la empatía de la sociedad para que «pongan su mirada en aquellos niños, niñas y adolescentes cuyo deseo es formar parte de una familia y poder crecer con seguridad, confianza, amor y esperanza ». Además de estos casos urgentes, APRAF-A recuerda que la necesidad va mucho más allá. Se buscan familias para acogimientos temporales, permanentes y especializados, y especialmente para acoger a grupos de hermanos . Separarlos supone romper otro lazo más en historias de vida ya marcadas por la fragilidad. También es clave encontrar familias para menores de más de cinco años, que con frecuencia son los más olvidados . Desde la entidad se insiste en que, incluso con 9, 11 o 13 años, todavía hay infancia. Ellos también demandan mimo y cariño. Acercar el acogimiento a la ciudadanía Para derribar mitos y acercar la realidad del acogimiento familiar, APRAF-A ha programado distintas actividades de sensibilización . Este martes ha tenido lugar un cuentacuentos en la Biblioteca Provincial, y este miércoles, 16 de julio, ha instalado una mesa informativa en el centro comercial Jaén Plaza. El objetivo es claro: explicar de forma directa qué implica ser familia de acogida y cómo se puede iniciar el proceso. Además, todos los jueves a las 12:00 horas , durante este verano, se celebran sesiones informativas online a través de la plataforma Meet, abiertas a cualquier persona interesada en saber más o resolver dudas. Contrario a lo que muchas personas creen, ser familia acogedora no exige requisitos complejos ni grandes recursos. Lo esencial, explican desde APRAF-A, es que haya consenso dentro del hogar , ya sea una persona sola o una pareja, con o sin hijos, sin importar la orientación sexual, y una estabilidad mínima, tanto emocional como económica. También es importante entender que cada niño o niña llega con su historia, sus vínculos, sus heridas. El respeto a esa trayectoria personal es parte del compromiso que implica acoger. El proceso arranca con una sesión informativa. Después se presenta la solicitud, se recibe formación específica y se realiza un estudio de idoneidad. A partir de ahí, si se identifica un menor cuya situación encaja con ese hogar, comienza el acogimiento, que estará siempre acompañado por el equipo técnico de la asociación. En la actualidad, unas 110 familias en la provincia de Jaén han abierto sus puertas a menores en situación de desprotección. Gracias a ellas, alrededor de 140 niños y niñas viven hoy en un entorno familiar, con rutinas y afecto . Pero no es suficiente. APRAF-A recuerda que el acogimiento no es una adopción . No busca sustituir a nadie, sino ofrecer un entorno estable mientras se resuelve la situación familiar del menor. A veces será por unos meses. A veces por más tiempo. Pero siempre con el foco en el bienestar del niño o la niña. La asociación, que actúa como servicio autorizado por la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad de la Junta de Andalucía, pone todos sus recursos al servicio de este objetivo: que ningún menor crezca sin familia. Para quienes deseen dar el paso o simplemente informarse, la entidad ofrece distintos canales de contacto: página web, redes sociales, atención telefónica y las sesiones informativas semanales.