Santorini ha sido testigo de un mágico momento para Lady Eliza Spencer. La sobrina de Diana de Gales se comprometió con su novio, Channing Millerd, con quien mantiene una relación desde hace nueve años. La noticia fue compartida en sus redes sociales, donde publicaron fotografías del romántico momento y, sobre todo, el anillo. «Por siempre y para siempre», escribió Eliza en su cuenta de Instagram, confirmando su compromiso, el cual ha emocionado a sus miles de seguidores y conocidos. «¡La mejor noticia de todas! ¡No podría estar más feliz por los dos! LA MEJOR NOTICIA DEL MUNDO. ¡Los quiero con todo mi corazón! ¡La pareja perfecta y un compromiso de ensueño!», comentó su Lady Amelia, su gemela. La pareja se conoció en una cena organizada el cuñado de Eliza, Greg Mallett, en Ciudad del Cabo, donde las hermanas crecieron junto a su madre, la exmodelo Victoria Lockwood. Greg tenía la intuición de que encajarían a la perfección, y no se equivocó: desde aquel primer encuentro, se volvieron inseparables. «Tenemos una relación muy fuerte, cariñosa y solidaria. Es mi mejor amigo. Nos entendemos muy bien y, pase lo que pase, siempre estamos ahí el uno para el otro. Estoy convencida de que él es el elegido: nuestro vínculo se basa en la confianza, las risas y los valores compartidos», confesó Lady Eliza en una conversación pasada con '¡Hola!', en la que ya adelantaba que la boda era una idea que rondaba sus planes de futuro. En esa misma entrevista, la sobrina de la Princesa Diana explicó que ambos fantaseaban con una boda junto al mar: «Nos encanta la idea de una boda en otro destino. Nos atrae Italia, sobre todo, algún lugar junto al mar nos parece muy romántico. España tiene el mismo encanto costero que nos encanta. Al mismo tiempo, la boda de Amelia y Greg en Ciudad del Cabo fue inolvidable, y Sudáfrica siempre será nuestro hogar». Sobre Millerd se sabe poco, más allá de que trabaja en el mundo empresarial o tecnológico, con base en Londres y perfil bajo. A pesar de mantenerse fuera del foco mediático, ha acompañado a Eliza a numerosos actos públicos y parece haberse integrado por completo en la vida de los Spencer. Este compromiso no solo marca un nuevo capítulo para la pareja, sino que también refuerza la imagen de una nueva generación Spencer: menos ligada al protocolo, pero igualmente carismática, internacional y consciente del legado que representan. Con una isla griega como escenario, un anillo brillante como promesa y el mar como testigo, Lady Eliza Spencer ha iniciado su camino hacia el altar. Una historia que, aunque alejada de los salones de Buckingham, promete emocionar a todos los que siguen de cerca la vida de los herederos de Diana.