Otro primer martes de mes con la misma imagen que se repite desde el inicio de esta legislatura: la concentración contra la violencia de género en el parque de la Vega con dos pancartas enfrentadas y en tres grupos diferenciados: PP, PSOE e IU-Podemos. Con los más de treinta grados que se han registrado en Toledo este cinco de agosto a las diez de la mañana, los partidos políticos, con la ausencia de Vox, se han concentrado contra contra la violencia de género, en un acto organizado por el Consejo Local de la Mujer en la Vega. Por parte del equipo de gobierno, la concejal de Cultura y Patrimonio, Ana Pérez, y varios concejales de la Corporación Municipal, que han condenado el asesinato de dos mujeres en el mes de julio a manos de sus parejas o ex parejas, «y ha lamentado que esto vuelva a suceder». Por ello, la concejal, que ha tomado la voz ante los periodistas por la ausencia, por vacaciones de Marisol Illescas, ha reclamado también unidad política e institucional para luchar «contra esta lacra que está viviendo la sociedad». Además, ha recordado la firma del convenio VioGén como ejemplo de colaboración institucional, para hacer un seguimiento y proteger a las mujeres y los menores que están en riesgo de ser víctimas de violencia de género. El Grupo Municipal Socialista, que ha tenido una gran representación en la concentración de este martes, ha reclamado el fin de los discursos que minimizan o blanquean el machismo y la urgencia de actuar sin ambigüedades frente a la violencia de género. «No mueren, las matan. No desaparecen, las hacen desaparecer. No se rompen solas, las rompen a golpes, insultos y miedo». Y es que esta vez han sido los representantes del Partido Socialista, como miembros del Consejo Local de la Mujer de Toledo, los que han sido encargados de elaborar y dar lectura al manifiesto contra la violencia machista en la concentración mensual que cada primer martes de mes se celebra en el Parque de la Vega. Helena Rodríguez , secretaria de Atención a la Ciudadanía de la Ejecutiva Local del PSOE; Irene Carmena, secretaria de Organización de Juventudes Socialistas de Toledo, y Pablo García, viceportavoz del Grupo Municipal Socialista, han sido quienes han dado lectura al texto, en el que, desde los más jóvenes del PSOE, han recordado que «nos negamos a crecer en una sociedad donde una mujer tiene que tener miedo de volver sola a casa; nos negamos a aceptar que el amor duela, el amor no duele, el machismo, sí. No es amor. Es violencia. Si te controla, no te quiere. Si te revisa el móvil, no es por celos sanos. Si te insulta, no es un mal día. Si te empuja, no fue un error. No te confundas: El machismo no está solo en los telediarios, está en tu grupo de WhatsApp, en tu clase, en tu pareja, en tu fiesta del finde..» Además, durante la lectura, se ha hecho un llamamiento a la acción real y comprometida por parte de las instituciones, la ciudadanía y, especialmente, de los hombres: «La participación masculina es crucial para lograr una sociedad más justa y equitativa». Asimismo, se ha rechazado frontalmente la eliminación de políticas de igualdad y se ha denunciado la complicidad institucional que, según el manifiesto, se esconde detrás de pactos políticos que relegan los derechos de las mujeres. «No vamos a normalizar el retroceso. No vamos a normalizar la eliminación de la concejalía de Igualdad. No daremos ni un paso atrás», en referencia al pacto de PP y Vox en el Ayuntamiento de Toledo. También han recordado el teléfono de atención a víctimas de violencia de género (016), que no deja huella en la factura y puede salvar vidas. Desde IU-Podemos, su portavoz, Txema Fernánde z, ha pedido al Grupo socialista del Ayuntamiento de Toledo que se dirija a su grupo en las Cortes para que en este septiembre se implemente la asignatura de Educación para la Igualdad aprobada en la ley del año 2018 en Castilla La Mancha y «que sigue sin implementarse y que sigue sin dotación presupuestaria». Txema Fernández ha querido recordar a las «Trece Rosas», las trece jóvenes mujeres, la mayoría menores de edad, que fueron fusiladas por el régimen franquista el 5 de agosto de 1939 en Madrid, España.