Rafael Amargo vuelve a ocupar titulares, aunque esta vez no por su carrera ni por sus polémicas, sino por un motivo que ha encendido todas las alarmas. El bailaor granadino se encuentra ingresado de urgencia en el hospital tras sufrir un grave problema de salud . La noticia la adelantó el programa 'Fiesta', de Telecinco, donde su pareja, Luciana Bongianino, ofreció declaraciones directas sobre el estado del artista. «Su situación es bastante crítica», aseguró Bongianino a las cámaras del espacio que conduce Emma García, visiblemente afectada. La actriz relató que todo comenzó con un fuerte episodio de fiebre hace unos días. Tras recibir asistencia médica en su domicilio, los profesionales decidieron trasladarlo de inmediato al hospital al no poder determinar la causa de su malestar: «Como los médicos en el domicilio no podían determinar qué era, lo hemos tenido que traer al hospital de urgencia». Una vez ingresado, el diagnóstico fue claro: Amargo padece una i nfección en el colon . Debido a ello, actualmente recibe tratamiento intravenoso y se encuentra «a base de sueros por vena porque no puede comer ni beber», tal y como explicó su pareja. Además, Luciana no dudó en señalar al estrés como posible desencadenante de este nuevo revés en la salud del bailaor: «Puede haber sido a causa del estrés», afirmó, en referencia a los meses complicados que el artista ha vivido en el terreno laboral y personal. El ingreso hospitalario supone un nuevo golpe en la trayectoria reciente de Amargo. Tras ser absuelto en 2023 de los cargos de tráfico de drogas que pesaban sobre él, un proceso que lo llevó incluso a pasar por prisión en 2020, el bailaor trató de retomar su carrera con el espectáculo 'Majestad Flamenca'. Sin embargo, los problemas con la producción y la falta de apoyo del público empañaron lo que debía ser su gran regreso. Él mismo confesaba meses atrás a 'La Vanguardia' que había sido «apaleado hasta el punto que parecía que buscaban la muerte de un artista» y que incluso en televisión sentía las puertas cerradas: «Estoy marcado, no me quieren ni para un reality. En este tiempo lo he vendido todo para poder comer». Si hay algo que no le falta en este difícil momento es la compañía de Luciana Bongianino, que no se ha separado de él ni un instante. Amargo ya había reconocido en el pasado la importancia de su pareja, a quien describió como su gran sostén : «Si hay un altar, es el que se merece ella, porque ha estado todos los días, no ha faltado ni uno». Hoy, de nuevo, es ella quien le sostiene mientras atraviesa uno de los episodios más delicados de su vida. La incertidumbre sobre su evolución mantiene en vilo a familiares, amigos y seguidores, que esperan que el artista pueda salir adelante una vez más.