La hiperburbuja de la Inteligencia Artificial
Hay quien lo llama “El debate del Siglo”: ¿Están Sobrevaloradas las Acciones de Inteligencia Artificial?
Los mercados accionarios en el mundo y en la Unión Americana han experimentado un ciclo alcista muy importante en los últimos 3 años, en el que ya se detectan algunos síntomas de sobrevaluación. Sim embargo, existe un sector que ha presentado un auge sin precedentes aún más impresionante, que es el de las acciones vinculadas a la inteligencia artificial (IA), impulsado por las expectativas de una revolución tecnológica y de un crecimiento exponencial de las futuras utilidades de las empresas líderes del sector. Sin embargo, la valuación que han alcanzado sobre todo las que se conocen como las 7 magníficas, hace un posible “sobrecalentamiento” del mercado y el riesgo de una burbuja especulativa similar a la crisis de las punto com.
Empresas como Nvidia, Microsoft, Google, Apple y Amazon han visto dispararse sus valoraciones, superando al mercado general con rendimientos extraordinarios. Este crecimiento se basa en la expectativa de que la IA transformará todas las industrias y generará un valor de mercado global que podría superar los 300 mil millones de dólares para 2026. El 61% de las empresas de la Bolsa de Nueva York planea aumentar su inversión en IA en el año entrante, lo que demuestra la confianza generalizada en el potencial de la tecnología. No obstante, la duda prevalece; estas valoraciones reflejan adecuadamente las utilidades reales actuales o más bien se basan en proyecciones futuras demasiado optimistas.
Vuelvo a recordar que en la fiebre del Dot.Com, a principios del 2000 la empresa Amazon que había reportado una pérdida de USD$600 millones de dólares, superó en su valor de capitalización al que tenían las acciones de General Motors que era la empresa de mayor capitalización en el mundo de siempre. Nos cuestionábamos como una empresa que era una simple librería en línea podía superar el valor de una empresa global industrial tan importante como GM
¿Cuales podrían ser ahora las señales de “sobrecalentamiento”? Varios factores sugieren que el mercado de la IA podría estar sobrecalentado:
1. Valoraciones elevadas: Las acciones de las empresas de IA cotizan a múltiplos de ganancias significativamente más altos que el promedio histórico del mercado en general, y de los múltiplos actuales de la mayoría de las empresas, lo que indica expectativas de crecimiento muy ambiciosas o fuera de la realidad
2. Aumento rápido de precios: El valor de las acciones tecnológicas, especialmente las relacionadas con la IA, ha aumentado a un ritmo vertiginoso en un corto período de tiempo, superando a otros sectores del mercado.
3. Incertidumbre sobre la utilidades futuras reales: Aunque la IA promete una revolución tecnológica y un gran valor de mercado a futuro, algunos analistas cuestionan cuándo estas empresas generarán utilidades reales tan altas que justifiquen sus exageradas valoraciones actuales.
4. Acuerdos millonarios y euforia: La carrera por la IA ha generado acuerdos y noticias atípicas que han alimentado la euforia de los inversores, a menudo sin un análisis fundamental exhaustivo.
Que volvamos a escuchar: “Los métodos de valuación tradicionales ya no son válidos”, “Esta vez lo que está pasando es completamente diferente”, o argumentaciones similares, hacen seguro que estemos en presencia de una burbuja, pero esta vez se trata de una burbuja dentro de otra burbuja.
Es imposible predecir cuanto tiempo más durará esta tendencia, pero es una verdad irrefutable que todos los booms terminan en cracks. Normalmente antes de un crack suelen ocurrir episodios de corrección, o de ajuste técnico. En el caso de la Inteligencia Artificial los riesgos principales incluyen:
1. Precios Desvinculados de los Fundamentos: Algunos precios de las acciones han aumentado demasiado rápido, y aún está por verse cuándo generarán beneficios reales proporcionales a su capitalización de mercado, un recuerdo de la falta de rentabilidad en muchas empresas durante la burbuja de las puntocom.
2. Volatilidad del Mercado: Al ser una tecnología incipiente, la inversión en IA conlleva una volatilidad inherente. Es difícil predecir con certeza quiénes serán los ganadores a largo plazo y quiénes se quedarán atrás.
3. Ciclo del Capital: Los inversores enfrentan el riesgo de un “ciclo del capital”, un patrón económico recurrente donde la sobreinversión en un sector en auge finalmente conduce a rendimientos decrecientes y caídas de valor.
4. Falta de Transparencia: La complejidad de los algoritmos de IA plantea desafíos en términos de transparencia y explicabilidad, lo que puede dificultar la evaluación precisa del valor y el riesgo subyacente de las empresas.
El riesgo de una corrección es inminente, lo que podría generar lo siguiente:
1. Pérdida masiva de valor: El estallido de una burbuja de IA podría borrar billones de dólares en valor de mercado, en unas cuantas horas, afectando a inversores particulares e institucionales por igual.
2. Reducción del capital para I+D: Una caída del mercado podría limitar la disponibilidad de capital para la investigación y el desarrollo futuros en el campo de la IA.
3. Volatilidad del mercado: La incertidumbre en torno al desarrollo y la rentabilidad de la IA puede generar una mayor volatilidad en los mercados bursátiles globales.
Si bien el potencial de la inteligencia artificial para automatizar procesos, analizar datos y transformar industrias es innegable, la velocidad y magnitud del aumento de los precios de las acciones han generado preocupaciones válidas sobre una posible sobrevaloración. La clave para los inversores reside en diferenciar entre el potencial genuino a largo plazo y las expectativas desmedidas a corto plazo, evitando el “ciclo del capital” que históricamente ha destruido riqueza en industrias en auge. El escepticismo y un análisis fundamental cuidadoso son esenciales en un mercado impulsado por el entusiasmo por la innovación tecnológica.
