Las claves del documento del PP que abre la puerta a pactar la renovación del CGPJ con el Gobierno
Más allá del debate sobre el estado de la nación y sus resoluciones, esta semana el Congreso decide sobre tres normas importantes. Una de ellas es la reforma que permitirá al Consejo General del Poder Judicial en funciones nombrar a dos magistrados del Tribunal Constitucional como parte del turno que comparte con el Gobierno. A este le corresponde elegir a otros dos integrantes y tiene interés en hacerlo cuanto antes porque, con ello, revertiría la actual mayoría conservadora que hay en el TC. En este contexto, el PP ha hecho pública la propuesta para negociar la renovación del CGPJ que ha traslado al Ejecutivo y una de las condiciones es que abandone esta reforma: “Exigimos la retirada de la ley para nombrar el TC que el Gobierno ha pactado con ERC”, ha asegurado su vicesecretario de acción institucional, Esteban González Pons.
- Tic-tac. Se trata de una exigencia a la que los socialistas tienen que dar una respuesta rápida, en tanto que está previsto que el Congreso le dé el jueves el visto bueno y la remita al Senado mediante el procedimiento de lectura única. Es decir, sin que pase por la comisión correspondiente ni se le puedan introducir enmiendas.
Una reforma sobre lo ya reformado. Hasta hace poco, el Consejo General del Poder Judicial podía realizar estos nombramientos, a pesar de estar en una situación de interinidad. Sin embargo, PSOE y Unidas Podemos impulsaron una ley que limitaba muchas de sus funciones en 2020, cuando este órgano ya llevaba dos años con el mandato caducado.
Cambio de postura. La decisión anunciada por la directiva liderada por Alberto Núñez Feijóo contrasta con la posición mantenida por su predecesor, Pablo Casado, quien exigía que se cambiara el sistema de elección para que los vocales del turno judicial del CGPJ fueran elegidos “directamente por y entre todos los jueces y magistrados”.
Los otros requisitos del PP para la renovación del CGPJ
Aunque la paralización de esta reforma exprés sobre la elección de los magistrados del TC es una “línea roja” para los populares, el PP ha planteado otra condición para negociar la renovación del CGPJ: presentar una proposición de ley conjunta en favor de “la despolitización de la Justicia”.
En este caso, los aspectos planteados, sin embargo, “no son innegociables” para los populares: “Si hiciéramos eso no hablaríamos de pacto (…) Habrá lugares en los que se pueda ir a menos”, ha matizado González Pons. Entre los cambios que proponen están:
- Derogar por completo la reforma de PSOE y UP. El PP considera que esta reforma “impide al CGPJ tomar casi cualquier decisión estando en funciones” y quiere volver a la legislación que había antes de la ley impulsada por los partidos del Gobierno: “Debe derogarse íntegramente y no solo en lo que respecta al TC”, recoge el documento.
- No interferir en la designación de su presidente. Hasta ahora, PP y PSOE apalabraban a quién se elegiría presidente del CGPJ durante las negociaciones para la renovación de los vocales. Sin embargo, Génova plantea que a partir de ahora sean los propios vocales los que tomen la decisión “sin pactos previos ni indicación de cualquier tipo”.
- Iniciar un cambio en la elección de los vocales del CGPJ. El PP acepta el sistema actual siempre y cuando se acuerde que el CGPJ recién elegido elabore “una propuesta del sistema de elección de los vocales del turno judicial” en un plazo de seis meses desde su toma de posesión. Esta proposición será entregada a una ponencia creada en la comisión de Justicia del Congreso para que emita un informe al respecto, también en un periodo máximo de medio año.
- Posible recusación de Dolores Delgado. El documento plantea que se recoja “expresamente” esta posibilidad, así como que se impida acceder al cargo a quien haya ocupado un puesto político en el último lustro.
- Límites a las puertas giratorias y a la elección de magistrados con pasado reciente en política. Génova propone que los jueces y magistrados que ocupen un cargo de elección política o de gobierno con rango superior a director general no puedan ingresar en el servicio hasta dos años después de su cese. En la misma línea, no podrían ser nombrados vocales del CGPJ quienes hayan ostentado un puesto político en los cinco años anteriores.
- Más requisitos para el TS. Para ser designado magistrado del Tribunal Supremo haría falta una experiencia de 25 años de servicio activo en la carrera judicial, sin que compute para ello los años en los que la persona se ha encontrado en una situación de servicios especiales.
- Aumento de las mayorías. Todos los cargos de la carrera judicial deberán ser nombrados por el CGPJ por una mayoría de tres quintos. Esto es, con un mínimo de 13 votos de un total de 21.
Por otro lado, el PP apuesta por incrementar en 1.000 el número de jueces en los próximos cinco años, por mantener el actual sistema de oposiciones como vía de acceso a la carrera judicial y por modificar la elección del magistrado autonómico, de forma que el mandato de las asambleas autonómicas no sea vinculante para el CGPJ.