PP y PSOE coinciden en tachar de «barbaridad» las palabras de Abascal sobre la Usal pero sin acordar un texto de apoyo a la institución

Las palabras que el presidente de Vox, Santiago Abascal , pronunció en Washington, en las que acusó a las universidades de Salamanca, Bolonia y Harvard de ser «una máquina de censura, coacción, adoctrinamiento y antisemitismo» han llegado este jueves a las Cortes de Castilla y León en forma de proposición no de ley del Grupo Socialista para apoyar a la institución académica salmantina y reprobar al vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, por calificar como «memorable» su discurso en tierras norteamericanas. El debate sólo ha servido para confirmar los planteamientos de unos y otros sin que haya sido posible llegar a aprobar un texto conjunto de apoyo a la Universidad de Salamanca. El PSOE, de la mano de Fernando Pablos, ha insistido en pedir la reprobación y el cese de García-Gallardo por el «enorme daño causado». El portavoz del Grupo Popular, Raúl de la Hoz , ha reiterado que las afirmaciones de Abascal fueron «un inmenso error y una auténtica barbaridad» y presentó una enmienda al texto del PSOE para mostrar públicamente el apoyo a la Universidad de Salamanca y reprobar las declaraciones de Abascal en sintonía con la iniciativa que populares y socialistas sacaran adelante en el Ayuntamiento salmantino. Sin embargo, el PSOE la rechazó por completo porque nada se decía en la emmienda sobre García-Gallardo. Noticia Relacionada estandar No Rocío Lucas rechaza «de pleno» las críticas de Abascal a la Usal, hechas «desde el desconocimiento» ABC El alcalde de la ciudad tilda las declaraciones del líder de Vox sobre la institución docente como «absurdas» y «sin sentido» En la formación aludida, Vox, su procurador Javier Teira ha insistido en defender la institución académica y ha acusado al PSOE de «crear una polémica artificial para tapar con su traición a España y su corrupción«. Ha mantenido, además, ha reiterado que la intervención de Abascal fue »memorable« y ha defendido que puso a la Universidad de Salamanca «al mismo nivel que Bolonia o Harvard». También ha alabado a la comunidad universitaria salmantina al considerar que «con una excelencia y sacrificio mantiene el nombre de la institución en lo más alto a pesar del aislamiento geográfico por la ausencia de infraestructuras de transporte, la carencia de infraestructura de docencia e investigación y las precarias condiciones laborales de los docentes que tienen su origen en el sistema autonómico de financiación y en las leyes socialistas«.