El turismo vuelve a galopar en España y sigue batiendo récords: en 2024 recibiremos más de 90 millones de visitantes. La cifra habla del músculo de nuestra principal industria, pero también invita a reflexionar acerca de su futuro y de cómo hallar el equilibrio entre cantidad y calidad. La necesaria adaptación a la revolución tecnológica y los pasos que debe dar el sector para adoptar un crecimiento sostenible son algunas de las cuestiones sobre las que giró el Foro Internacional Turium Madrid 2024 , organizado por Turium, la división de turismo de excelencia de Vocento. Esta jornada, que reunió a máximos responsables de distintos ámbitos, avanzó las tendencias que marcarán el rumbo del turismo en nuestro país. Apuesta por los algoritmos La digitalización permitirá la gestión eficiente de grandes volúmenes de datos y la creación de modelos predictivos útiles en la toma de decisiones. Gracias a la información recabada de los usuarios y a la interacción con los asistentes virtuales, la IA generativa será capaz de sugerir destinos y actividades y contribuirá a crear experiencias únicas y memorables. Y esto ocurrirá en toda la cadena de valor. Almudena Maíllo, concejala delegada de Turismo de Madrid, confirma la importancia de este elemento. «El éxito que está cosechando la capital no es fruto de la casualidad, sino de tener clara nuestra hoja de ruta, en la que ha sido decisiva, entre otros elementos, la digitalización, donde hemos realizado una inversión municipal de cinco millones». Ferrán García, director del Centro de Excelencia de Datos y CRM de Iberia, incide en la relevancia de la medición datos: «En nuestro caso, por ejemplo, nos ayuda a que los vuelos sean más eficientes y a conocer de manera más precisa las demandas de nuestros clientes y anticiparnos a sus necesidades, entre otras cuestiones. La vida es en tiempo real, así que es relevante que los datos sean recabados también al momento». Soluciones flexibles y sostenibles Una de las grandes demandas del viajero será la libertad al desplazarse. Consciente de ello, el sector de la automoción trabaja en soluciones flexibles y sostenibles. Emilio Herrera, presidente de KIA Iberia, compartió algunas de las iniciativas que se impondrán, como el fomento del 'car sharing' o las suscripciones puntuales pasar usar vehículos de forma ágil en las ciudades. El máximo responsable de la firma, muy centrada en la innovación, espera la llegada de los PBV (Platform Beyond Vehicle), coches comerciales eléctricos con soluciones de software avanzadas y grandes posibilidades de personalización para satisfacer las demandas de los usuarios. «La mejora en la experiencia del usuario pasará por el desarrollo de vehículos inteligentes para una conducción más satisfactoria», asegura Herrera. Mimar y formar al talento Todos los expertos que conforman el think tank de Turium coinciden en la importancia de apostar por la fuerza laboral. Ángel Rivera, CEO de Banco Santander España, considera que la excelencia tiene que ver con el mimo hacia el turista. «Por eso es fundamental invertir en la formación de quienes trabajan en la cadena de procesos que supone un viaje, desde la gestión de la reserva hasta el check out en el hotel. La profesionalización constituye el gran valor añadido». Pablo Ganguli, fundador de la organización multidisciplinar Liberatum, también defiende que «hay que aprender a gestionar el talento, tener una mente más abierta, ser respetuosos con lo distinto y abrazar iniciativas aunque en ese momento nos parezcan muy disruptivas». Repensar las ciudades El diseño urbanístico definido en el siglo XX supuso la expansión de los principales destinos turísticos y la homogeneidad en la construcción, con la consiguiente pérdida de personalidad de las ciudades. El futuro, vinculado al compromiso con el medio ambiente, pasa por recuperar la esencia de las edificaciones tradicionales de cada territorio y aplicar un nuevo enfoque de ordenación y construcción. «Hasta hace poco, se creía que las grandes concentraciones arquitectónicas en vertical , como Benidorm, eran un mal ejemplo –apunta Carlos Lamela, presidente ejecutivo del estudio de arquitectura que lleva su apellido–. Hoy la opinión es la contraria. Si alojamos a todos los viajeros en construcciones horizontales, arrasaremos el paisaje. Ser sostenible implicará sopesar múltiples elementos, no solo poner fachadas verdes. Hay que tener en cuenta la idoneidad de la ubicación, la calidad de los materiales, el diseño y, claro está, su oportunidad». Vivencias y sensaciones Históricamente, el segmento 'high end' se ha asociado al precio. Sin embargo, el viajero de alto impacto actual se guía por otros parámetros y ansía vivir experiencias. ¿Conclusión? Diseñar propuestas únicas será fundamental para fidelizar al cliente premium. De esto sabe mucho Enrique Valero, CEO de Abadía Retuerta, quien subraya que «el turismo de excelencia será el Silicon Valley de nuestro país». Y añade: «El lujo es una sensación que consiste en parar el tiempo y gestionar las emociones del huésped. La forma de hacer que el cliente de excelencia vuelva es hacerle feliz, y para ello hay que ofrecerle vivencias, cosas bonitas que no olvide nunca». El equipaje de la integración Una de las medidas más eficaces en el camino hacia la sostenibilidad es fomentar la colaboración público-privada para dar visibilidad a los barrios y los negocios que no suelen aparecer en las guías turísticas. Así, el visitante descubrirá espacios insospechados y auténticos y consumirá en los comercios locales , participando así en la creación de un modelo abierto a nuevos agentes, menos masificado y más responsable. El sector puede jugar un papel relevante como integrador, como avanza Pablo Llano, director general de la ONG Cesal, dedicada a formar en el ámbito de la hostelería a personas en riesgo de exclusión social: «Debemos hacer partícipes a todos los segmentos de la sociedad, para que desplieguen su potencial, y formarles para poder retener el talento». Por su parte, Gilda Pérez-Alvarado, Group Chief Strategy Officer & CEO de Orient Express, concluye que «la marca España es poderosa, pero la fuerza laboral es imprescindible a la hora de proporcionar vivencias personalizadas y con valores».