Piedra refuerza su sistema contra el robo de productos de sus supermercados en Córdoba

Supermercados Piedra ha llegado a un acuerdo con la empresa Checkpoint Systems para renovar su alianza y reforzar los sistemas antihurto de sus más de 60 puntos de venta minorista, que reúnen más de 40.000 metros cuadrados, repartidos por las provincias de Córdoba y Jaén. El acuerdo con Checkpoint Systems incluye la renovación de su flota de sistemas antihurto, incorporando las antenas Evolve, que disponen de un perfecto diseño para integrarse en los supermercados y ejemplifican la apuesta de Grupo Piedra por la innovación en todas sus áreas de negocio. Con este nuevo sistema, los establecimientos contarán con la conectividad inalámbrica para realizar el mantenimiento remoto de los equipos, según informó la propia empresa. El objetivo de esta operación es encontrar soluciones particulares a cada supermercado y seguir mejorando la experiencia de compra de los clientes y la eficiencia; siendo más eficaces y manteniendo su filosofía de proporcionar un comercio cercano de productos variados y de calidad. Este refuerzo de una alianza que ya supera los 20 años, también incluye una nueva batería de soluciones como etiquetas RF y Alpha para la protección individual de los productos más susceptibles de ser hurtados, especialmente, los aceites en todos sus formatos, que se han convertido en una de las víctimas favoritas de los ladrones. Precisamente, Grupo Piedra es pionero en la protección de este producto en España. Según el último Barómetro del Hurto de la Distribución Comercial, cerca del 53% de los hurtos son protagonizados por bandas organizadas que detectan las oportunidades de hacer negocio y sustraen productos de alto valor en diferentes establecimientos para posteriormente revenderlos en mercados paralelos. La inversión de Grupo Piedra para modernizar su parque de antenas le permite sumar una solución eficaz para combatir el hurto, que según la firma tiene carácter profesional . El precio del aceite de oliva se ha disparado en los últimos dos años debido a la inflación y a la escasez de producción de este clásico de las cocinas mediterráneas. Este contexto ha provocado que se genere un mercado paralelo promovido por bandas organizadas que han optado por hurtar de forma reiterada en los supermercados para posteriormente proceder a su reventa.