La Coruña vuelve a respirar tras 46 días con residuos en sus calles

Ha sido la huelga en el servicio de recogida de basura «más larga» que ha sufrido La Coruña en años, pero la ciudad ya puede decir que la ha dejado atrás. El jueves por la noche, el personal de Prezero, la empresa concesionaria a cargo, se ha reunido y ha acordado desconvocar el parón en su trabajo que seguía activo desde el 24 de junio, día de San Juan y jornada posterior a las celebraciones asociadas a la víspera en toda la urbe. Este viernes, la alcaldesa, Inés Rey, ha celebrado que la ciudad haya «ganado» sin llegar a caer en el «chantaje», a la par que ha agradecido la resiliencia de los vecinos, que llevaban un mes y medio obligados, en según que zonas, a sortear acumulaciones de residuos en las aceras. Ahora, el Consistorio de la ciudad herculina tramita el fin del estado de emergencia sanitaria que se decretó el 22 de julio. En declaraciones remitidas a los medios y recogidas por Europa Press, la regidora ha celebrado la «buena noticia» que supone para la ciudad el acuerdo alcanzado la noche anterior pro la plantilla de Prezero –fruto de una asamblea impulsada por el Sindicato de Trabajadores de la Limpieza (STL)– con el que se ha logrado detener esta parálisis. La Coruña llevaba 46 días sufriendo «una huelga que ha sido la más larga en todos estos años», ha incidido Rey, pero, ha celebrado, «la ciudad ha ganado y ha salido reforzada, no ha cedido al chantaje» de la parte convocante, y el conflicto ha acabado por tocar a su fin «sin que hayan conseguido nada de ninguno de sus objetivos, fueran cuales fuesen». Aunque, en este tiempo, disfrutar de los espacios públicos que ofrece su lugar de residencia se le ha hecho cuesta arriba a la ciudadanía coruñesa, ante la que su alcaldesa ha lamentado las consecuencias y la prolongación de la problemática y ha enviado su agradecimiento por la «compresión» de la que ha hecho gala. «Quiero lamentar profundamente que todos los ciudadanos hayan tenido que vivir esta situación durante tantos días, 46, especialmente [en el caso de] aquellos que han sufrido daños materiales», ha dicho Rey, que ha agradecido «a todos los coruñeses la comprensión, la paciencia, el aguante que han tenido». Inés Rey ha extendido sus palabras de reconocimiento a todos los trabajadores de Prezero que sí se han mantenido «al pie del cañón y han trabajado aguantando todo tipo de presiones», así como al personal de Valoriza, la empresa a la que se recurrió tras declararse la emergencia sanitaria, y también al equipo municipal que monitorizó las operaciones, citando a «las diferentes concejalías implicadas que han estado trabajando durante todos estos días sin descanso». «Estoy segura de que esta huelga va a suponer un antes y un después en la relación entre el sindicato y la ciudad y que no vamos a volver a vivir situaciones como la que hemos padecido este verano», ha concluido la regidora socialista. Además de ella, también la comisión de seguimiento que se configuró al declararse la emergencia sanitaria valoró positivamente la desconvocatoria de la huelga. Y, de cara a optimizar futuras recogidas, ha avanzado la decisión de intensificar el servicio de limpieza «en puntos clave de acumulación de residuos«. Con las 50 toneladas de basura recogidas en la jornada del jueves, el Ayuntamiento contabilizaba el viernes un total de 934 toneladas despejadas por Valoriza desde la puesta en marcha del saneamiento de emergencia en las calles –retirando residuos en dos turnos por el día y hasta las once de la noche–. Y, según ha indicado el Consistorio en un comunicado oficial de balance, no se habían registrado altercados en las últimas 24 horas, pese a las anteriores oleadas de vandalismo. Desde que comenzó la huelga, en San Juan, el Concello lleva contabilizados 160 contenedores «quemados intencionadamente» a lo largo y ancho de la ciudad, con especial incidencia en las jornadas de parón en las que sobrevoló más tensión sindical. «Actos vandálicos que, además de implicar unos costes de unos 400.000 euros para las arcas municipales, también están suponiendo afectaciones y daños a bienes patrimoniales de las vecinas y vecinos de La Coruña«, advierten desde el Consistorio municipal. Así, a falta de incidencias recientes y rematada la huelga, la recogida de Prezero «sigue normalizándose», informan en otro comunicado. En la noche del jueves, última de la que se había ofrecido información oficial al cierre de estas líneas, pudo recogerse la totalidad de los residuos que había dispersos en los barrios de Sardiñeira-Elviña y Sagrada Familia, y despejarse cantidades elevadas en las zonas de Monte Alto, Pescadería- Centro y los Mallos (95%), así como en el entorno del Estadio de Riazor (85%), Ventorrillo (80%) y Mesoiro-Feáns-Velaire (70%). Por detrás, Castrillón (65%), Os Castros y Zona VIeja (50%), Matogrande-Eirís (45%) y Rosales-Labañou (40%).