Mientras la heroica ciudad dormía la siesta, aquel peculiar inglés intentaba adaptarse a su nueva vida allí. No lo consiguió. La contratación de Stan Collymore fue un parto complicado para el Real Oviedo . Por las peculiaridades del propio jugador y por el batiburrillo de intereses, personas y personajes que pululaban alrededor. Fue un insistente capricho de Radomir Antic . «Es equilibrado y culto. Si viene hablaremos del fichaje más barato en la historia del fútbol. Un lujo», dijo el entonces entrenador azul. La trayectoria de Collymore (Stone, Inglaterra, 22-1-1971) en el fútbol inglés llamaba la atención. Por tanto cambio de club — Crystal Palace, Southern United, Nothingam Forest, Liverpool, Aston Villa, Leicester, Fulham y Bradford — y porque cuando se calzaba las botas y se ponía serio, era un poderoso delantero (1,91 de estatura) con calidad y gol. Menos fascinación y muchos interrogantes suscitaban sus episodios extradeportivos. Violentas peleas con su novia, broncas varias en bares , vaciar un extintor en un hotel de La Manga o la retirada del carné de conducir por exceso de velocidad fueron algunas de las noticias que le dieron dudosa popularidad y un sospechoso apodo: 'Stan the Man (Stan el hombre). La indisciplina fue la razón principal de sus constantes cambios de camiseta y de la inesperada opción que se le presentó al Real Oviedo en el mercado de invierno del curso 2000-01. El Bradford lo 'regalaba', así que para cerrar el fichaje hubo que negociar en Madrid con cinco representantes e intermediarios, entre ellos el asturiano Herminio Menéndez , triple medallista olímpico en piragüismo. El 31 de enero de 2001, Collymore fue presentado como jugador del Oviedo y se estrenó de azul el 4 de febrero en Las Palmas . En el minuto 67 sustituyó a Paunovic . Cuando él entró, el Oviedo empataba; al final, perdió 1-0. Siete días después, el inglés debutó ante su público. En el instante en que pisó la hierba del Carlos Tartiere, minuto 58, los locales vencían 1-0 al Villarreal de Palermo . En el 59, el argentino igualó el partido. En el 90, los amarillos ganaron 1-3. En dos semanas, el estado de forma del británico era la comidilla en Vetusta . La sociedad futbolística —y civil— de la provinciana ciudad escenario de 'La Regenta', obra clásica de Clarín , generaba todo tipo de rumores sobre la dieta, el sobrepeso y las salidas nocturnas de aquel inglés. Antic alimentó los chismes cuando le apartó del grupo y le puso a plan. Tras dos convocatorias ausente, regresó el domingo 4 de marzo. Viajó a Vigo , se sentó en el banquillo y saltó al césped en el minuto 67 sustituyendo a Jaime . El Oviedo ya perdía 1-0 y el marcador no se movió. El equipo regresó a Asturias y el martes, jornada de descanso, el delantero voló a Londres para acompañar a su novia, embarazada y hospitalizada. El miércoles no se presentó en el entrenamiento. Horas después, su abogado telefoneó al club para comunicar que Collymore se quedaba en Inglaterra. No volvió a Oviedo... ni al fútbol . Años después, el ya exjugador confesó padecer depresión. «La depresión es un cáncer del alma. He tenido ideas suicidas. Es espantoso», llegó a decir. Luego quiso hacer carrera como actor de cine. Pretendía ser el «primer James Bond negro», pero se quedó en secundario en la película 'Instinto básico 2' portagonizada, al igual que la primera parte, por Sharon Stone .