El exministro de Transportes José Luis Ábalos ha dicho basta. Tras la auditoría encargada y difundida por el actual titular de la cartera, Óscar Puente , Ábalos, en conversación telefónica con ABC, asegura que «van a por mí» y que esto va a tener «consecuencias que estoy estudiando, por un lado legales y por otro políticas, porque es evidente que se ha buscado incriminarme ». Para empezar, su actitud como diputado en el Grupo Mixto va a cambiar: «Yo hasta ahora no me lo tenía que plantear, no me leía ni el orden día, seguía la directriz del grupo parlamentario, pero vista su actitud (la del partido) haré yo también lo mismo . Estaba actuando con seguidismo, porque no correspondía disciplina al estar fuera del grupo parlamentario socialista, pero vista la actitud tan poco presentable que han tenido…». Respecto a qué hará si tiene que votar el acuerdo con ERC para una hacienda catalana propia, sostiene que «habrá que ver cómo lo plantean, ya veremos a partir de ahora, porque después de este gesto nada me compromete». La investigación interna encargada por Puente ha dejado pequeños todos los enfrentamientos previos con su partido, que lo llegó a suspender de militancia. El exministro insiste en que el informe difundido no es una auditoría, sino un «compliance», como los que hacen empresas y otras organizaciones para identificar riesgos: «Es un mal precedente, porque no se pueden hacer investigaciones de este tipo habiendo una causa penal abierta, pero además está mal hecha y con mala intención». José Luis Ábalos argumenta que un compliance «no se puede encargar a una unidad que depende de ti, porque no tiene ninguna independencia» y añade que «a ningún interrogado se le advirtió de que eso iba a ser público… Es una pasada en todos los sentidos». Es más, el extitular de la cartera de Transportes se hace varias preguntas: «Oye, que se la hagan a todo el mundo. ¿Por qué no se hace en otros ministerios afectados por la misma investigación judicial? Sanidad tiene dos contratos en investigación judicial e Interior, por supuesto, en esta misma causa. ¿Por qué no se hacen? Y en el resto de administraciones nos íbamos a divertir mucho... El propio Óscar Puente compró mascarillas y lo denunciaron, porque se las compró a un amigo suyo, y la juez dijo que el hecho de ser amigo le vino bien para que se las vendieran…». Ábalos recuerda las publicaciones de hace unos años con las fotografías de Puente veraneando en un yate en aguas de Baleares pagado por el empresario al que había comprado meses antes material contra el Covid para el Ayuntamiento de Valladolid . «Dijeron que lo del yate no era delito porque el viaje lo pagó el dueño de la sociedad pero no la sociedad con la que contrataban… Lo ha vivido él también». Efectivamente, la juez Elena López Negrete sobreseyó el caso porque el empresario Sergio Zaiteguio pagó los 6.500 euros del alquiler del yate «de su bolsillo» y no a través de la sociedad que había sido adjudicataria de un contrato de 195.178,20 euros del ayuntamiento vallisoletano. La titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Valladolid argumentó que no se podía probar que Zaitegui «agasajara por razón de su cargo público al Puente, mediante la invitación en un barco de recreo en Ibiza». José Luis Ábalos hace hincapié en la conversación con este diario -de la que matiza que «no es una entrevista formal» pero autoriza a difundir el contenido- en la licitud de la compra de mascarillas a Soluciones de Gestión: «La contratación ya la ha mirado el Tribunal de Cuentas, que tiene sección jurisdiccional, y la Fiscalía siempre ha dicho que esa parte está bien. De hecho, el fiscal, para retener la causa frente a la Fiscalía Europea , dijo que no ha habido malversación de fondos europeos porque el género se entregó correctamente y a precios inferiores a los de mercado». Especifica que la querella es por cohecho, organización criminal y blanqueo de capitales, «pero la contratación la dan por buena». Asevera que el recorrido legal del documento, que el PP entregó en la Audiencia Nacional, es «nulo, pero queda la noticia en el aire todos estos días». La auditoría lo señalaba por duplicar el pedido de cuatro millones de mascarillas a ocho en apenas media hora, porque la empresa advirtió que «o todo o nada» . Ábalos no recuerda por qué fue, pero es contundente: «Yo firmo lo que haga falta para tener las mascarillas. Es una temeridad decir que el estado de alarma eran 15 días y no se justificaba más. No había ese material y había que aprovisionarse». Especifica el también exsecretario de Organización del PSOE que Soluciones de Gestión , la empresa de la trama, no cobraba por adelantado: «La solvencia no la tenían que demostrar sino materializar. El ministerio pagaba una vez entregado el material correctamente, no había riesgo de estafa porque si no cumplían no cobraban, y eso no lo hacía ninguna empresa, que exigían cobrar por adelantado». Insiste en que las mascarillas eran buenas y a buen precio: «En la Comunidad de Madrid en esas fechas compraron a precios de entre tres y pico y seis euros, y estas nos costaron 2,5 la unidad». Valora José Luis Ábalos que el informe encargado por Puente «no es para colaborar con la Justicia, sino para suplantarla en paralelo» y que obedece a un «objetivo político, ir a por mí». Está convencido de que la decisión ha sido del propio Puente, «aunque quizás haya consultado algo». Cree, además, que esta auditoría no beneficia a Pedro Sánchez «porque no deja de ser la gestión de un Gobierno socialista , pero yo creo que ya no hay nadie al frente de nada, ves la estrategia y es todo reactivo. Es muy feo en todos los sentidos».