Agosto ha traído consigo el desplome del euríbor . El índice al que se referencian la mayoría de las hipotecas en España se ha hundido en 0,36 puntos porcentuales respecto a julio, al 3,17%, lo que supone el mayor descenso desde febrero de 2009. Un movimiento de calado que lo que hace también es anticipar que habrá más bajadas de tipos del Banco Central Europeo (BCE) en la última parte del año. Se trata del quinto mes consecutivo en el que el euríbor registra una bajada intermensual, aunque el cambio de ciclo se inició el pasado noviembre, cuando el mercado descontaba que pronto empezarían a bajar los tipos. Ese descenso del precio del dinero, que impacta de manera casi directa en el euríbor, tardó en llegar más de lo esperado (junio), pero la senda lleva tiempo siendo a la baja. Y no solo en la comparativa de mes a mes se registra un descenso acusado del índice hipotecario sino también en términos interanuales, que es la variación que realmente sirve para la mayoría de los hipotecados a tipo variable ya que lo habitual es que la revisión de los intereses del préstamo sea anual. En términos interanuales, en agosto el euríbor se ha desplomado en algo más de nueve décimas. Esto supone la mayor bajada desde marzo de 2013, en plena crisis financiera. Este descenso supone un alivio para los hipotecados a variable que les toque ahora su revisión de casi 80 euros al mes. Una hipoteca media de 150.000 euros, a 25 años y a un interés de euríbor más 1% de diferencial tenía una cuota en agosto de 2023 de 883,28 euros al mes, lo que equivale a 10.599,36 euros al año. Por aquel entonces el índice estaba en máximos, en el 4,07%. Ahora, esa misma hipoteca media tiene una cuota de 805,57 euros al mes, lo que son 9.666,84 euros al año. Esto supone 77,71 euros menos al mes y 932,52 euros menos al año. Se trata del descenso de la cuota más acusado en 11 años , aunque en teoría todavía habría margen para más bajadas en los próximos trimestres. «Desde que en abril el euríbor comenzó su tendencia descendente, ha ido anticipando y presionando al Banco Central Europeo para impulsar una reducción de los tipos de interés oficiales. Este mes de junio, el primer ajuste a la baja en los últimos 8 años, ha llevado al índice a registrar su nivel más bajo desde diciembre de 2022, impulsado por las expectativas del mercado de desescalada por parte del BCE», recogen desde Fotocasa. Miquel Riera, responsable de Hipotecas de Helpmycash, apunta a que este índice podría mantener su tendencia a la baja para los próximos meses, aunque se muestra cauto en las previsiones; con todo, no descarta que pueda situarse por debajo del 3% a final de año. «Como las principales entidades bancarias de nuestro continente dan por hecho esos recortes, se han adelantado bajando el interés que aplican a sus préstamos interbancarios», explica el experto, en referencia a que el euríbor lo que es realmente es el interés al que se prestan dinero los bancos entre sí. De ahí que esté íntimamente ligado a los tipos del BCE. La institución monetaria bajó tipos en un cuarto de punto en junio para dejar el principal en el 4,25%. En julio mantuvo el precio del dinero estancado y este septiembre se espera que continúe con los descensos, coincidiendo también con el cambio de ciclo a la baja en la Reserva Federal . De aquí a final de año los analistas auguran que podrían producirse entre dos y tres bajadas de tipos de interés por parte del BCE para continuar con la relajación de la política monetaria. Pero todo está sujeto a una elevada incertidumbre ya que la organización dirigida por Christine Lagarde se basa siempre en los datos que se van conociendo mes a mes para tomar sus decisiones. Asimismo, las bajadas del euríbor no solo afectan a quienes tienen ya una hipoteca pendiente sino también a los que planean solicitar ahora una nueva porque si el coste de los créditos para vivienda baja, las ofertas de los bancos también en la nueva producción. Como publicó ABC , los bancos están preparando a fondo sus ofertas de cara a la última parte del año e incluso podrían verse ya préstamos a tipo fijo por debajo del 3% para tratar de captar clientes, especialmente en aquellas entidades con menos costes fijos como son las digitales.
