Desde el año 1950, cada mes de agosto se celebra al otro lado del charco, en Monterrey (California, Estados Unidos), uno de los eventos automovilísticos más exclusivos y llamativos del mundo: el festival de Pebble Beach. Cada edición —la recién celebrada ha sido la número 73— deja unas bellas postales en las que parece haberse parado el tiempo porque son los modelos clásicos los grandes protagonistas. La Pebble Beach Tour d'Elegance , una ruta de 112 kilómetros por carreteras de costa californianas de película es el punto de partida de un festival en el que se entregan muchísimos premios distintos dentro del concurso oficial del evento —Pebble Beach Concours d'Elegance—, el plato fuerte del certamen, en el que también tienen lugar exposiciones de las firmas más emblemáticas del mercado y una gran subasta, entre otras acciones. Precisamente en la subasta organizada por la casa oficial del festival, Gooding & Company, se ha vendido este año por un precio de 14 millones de dólares una de las cinco unidades auténticas conocidas de uno de los deportivos más elegantes de la historia: el Alfa Romeo 8C 2900B Lungo Spider de 1938 . El coche, una auténtica belleza clásica de color negro que ya fue premiada en Pebble Beach en el año 2000, es según la organización del festival «el mejor automóvil deportivo producido antes de la Segunda Guerra Mundial», y «representa la culminación de una década de desarrollo bajo la visión del ingeniero jefe de Alfa Romeo, Vittorio Jano, quien llevó a Alfa Romeo al camino de la gloria en los deportes de motor». Con este vehículo clásico, que perteneció a algunos de los coleccionistas de coches clásicos más importantes de la historia como Vojta Mashek o Ben Moser antes de ser recuperado recientemente tras haber sido sustraído en un atraco, Alfa Romeo conquistó numerosos éxitos en carreras automovilística de prestigio como las 24 Horas de Le Mans. «Una obra maestra automovilística indiscutible», concluye la organización del festival. El Alfa Romeo 8C 2900B Lungo Spider de 1938, pese a su belleza indiscutible, no ha sido el gran protagonista de la edición 73 del festival de Pebble Beach. Ese honor ha recaído en otra maravilla sobre ruedas, el Bugatti Type 59, c oche vencedor del premio más importante que se entrega en este certamen —han participado en total 214 automóviles de 16 países distintos—, el 'Best of Show'. El vehículo ganador del trofeo al mejor coche del concurso de elegancia es el primer Type 59 construido, el icónico modelo de la factoría de Ettore Bugatti —sus coches han ganado el premio principal en Pebble Beach en diez ocasiones, las mismas que vehículos de Mercedes-Benz—, un coche tan elegante que parece hecho a medida para pasearse por las inmediaciones de la mansión del fundador de la factoría en Molsheim (Francia). No en vano, es el único de los cinco Type 59 que Bugatti construyó que se quedó el citado Ettore : se vendieron cuatro y el empresario se quedó con esta unidad, que triunfó en el Gran Premio de Bélgica de 1934 y llegó a ser tercero en Mónaco. Después pasó por las manos del rey Leopoldo de Bélgica, que renovó su decoración, preservada hasta la fecha. El coche, que fue vendido precisamente en una subasta organizada por la casa de Pebble Beach en 2020 por más de 12 millones de euros, se ha convertido en el primer vehículo preservado —que no ha sido restaurado— en ganar el premio 'Best of Show' de Pebble Beach. «Este legendario Bugatti, el primer Type 59 construido, es un coche de carreras de fábrica poco común que registró múltiples victorias en Grandes Premios a manos de varios grandes pilotos importantes, y también tiene vínculos con la realeza», apuntó sobre el coche ganador del concurso su presidenta, Sandra Button. El Type 59 pertenece en la actualidad al coleccionista suizo Fritz Burkard, que se mostró exultante por su éxito en Pebble Beach. «Estoy muy feliz por el auto, muy feliz por Bugatti. Este auto es increíble. Tiene mucha historia, es uno de los Bugatti más exitosos de la historia, y ganar con este auto significa mucho para mí. Es la primera vez que gana un suizo, la primera vez que gana un europeo, la primera vez que gana un vehículo preservado . Es importante que la preservación también reciba reconocimiento, porque un auto solo puede ser original una vez. Y se conduce maravillosamente», aseguró. Aunque en menor medida que el Bugatti Type 59 que se ha coronado como el mejor vehículo de los que han participado en la edición 73 de Pebble Beach, la lista de automóviles clásicos que han brillado en el certamen californiano es larga. Sin ir más lejos, los tres modelos nominados junto al coche ganador al premio estrella del concurso: un Packard 1108 Twelve LeBaron Sport Phaeton de 1934; un sorprendente Lancia Stratos HF Zero Bertone Coupe de 1970; y un Talbot-Lago T26 Grand Sport Saoutchik Fastback Coupé del año 1948 que viajó al concurso desde la República Checa. Además del premio 'Best of Show', en Pebble Beach se entregan decenas de premios. Los más importantes después del citado son los denominados por la organización « Premios a la elegancia », categoría que se divide en cuatro premios distintos. El galardón del coche abierto más elegante ha sido para un Maserati A6G/54 1955 Zagato Spyder 2000, y en la categoría del deportivo más elegante de Strother MacMinn se ha impuesto una unidad del Maserati A6GCS Frua Spyder de 1955. Además, un Packard 1108 Twelve Dietrich Sport Sedan de 1934 perteneciente a la colección Lehrman (Palm Beach, Florida) ha sido elegido el vehículo cerrado más elegante y un Packard 1108 Twelve Dietrich Convertible Sedan de 1934 ha triunfado en la categoría del convertible más elegante. Además, se entregan también numerosos premios especiales, que han recaído en auténticas bellezas clásicas de cuatro ruedas. Todas serían dignas de mención, pero destacan por encima de todos modelos como el Hispano-Suiza J12 Vanvooren Cabriolet de 1934 , vencedor del trofeo Alec Ulmann, un premio creado en el 2012 para poner en valor el automóvil «que mejor encarna la combinación de excelencia en rendimiento y elegancia en diseño». El Ferrari 330 GTC Coupe Speciale de 1967 que ha ganado el trofeo del Presidente, y el precioso 1956 Maserati A6G Zagato Berlinetta con la carrocería en color rojo que ha sido elegido premio de la facultad de Diseño ArtCenter al automóvil «que mostró el mejor uso de la nueva tecnología en su época, tuvo un estilo e ingeniería innovadores y tuvo el mayor impacto en el diseño de automóviles actual», son otras dos de las joyas galardonadas en el histórico festival, que volverá a dejar postales únicas para los amantes de los coches clásicos en agosto del año 2025.