Los padres se sienten presionados por todo lo que visualizan en redes sociales como Instagram, Youtube o Tik Tok en relación a cómo cuidan a sus hijos. Al menos así se desprende del estudio 'Crianza contemporánea y uso de redes sociales. Tensiones y emociones' , que se presenta en el IV Congreso Nacional de Asociaciones de Enfermería Pediátrica. Entre las principales conclusiones del estudio impulsado por Biomecanics y realizado con madres y padres de niños de entre 6 meses y 3 años, destaca el fuerte impacto del entorno digital en su estado emocional, que lleva a un 86,5% de los progenitores a 'sentirse juzgados por su forma de criar', mientras que 3 de cada 4 aseguran 'sentir más soledad que antes en la experiencia de crianza', a pesar de que las redes sociales les permiten estar más conectados y tener mejor acceso a información. El alto volumen de información al que pueden acceder los progenitores aunque se valora de forma positiva, se siente como un arma de doble filo en su influencia sobre las cuestiones que afectan a la crianza de sus hijos. De hecho, 1 de cada 5 padres afirma 'vivir con dificultad el acceso continuo a información', una problemática que acarrea consecuencias como una mayor carga mental , debido la actualización constante, o complicaciones para disfrutar plenamente de la crianza de sus hijos. «El estudio muestra conclusiones significativas sobre cómo la crianza ha evolucionado en paralelo a nuestra relación con el acceso a la información. Los progenitores han encontrado en la consulta de fuentes en internet y en las redes sociales una herramienta muy valiosa para acceder a información y puntos de vista de otras madres y padres, pero esto también ha disparado su autoexigencia y la presión por hacer siempre elecciones perfectas. Se trata de un efecto no deseado vinculado a los nuevos modelos de crianza y que es aconsejable que las madres y padres aprendan a relativizar», explica Marta Delgado, CEO de la consultora de investigación Twiga y socióloga responsable del estudio impulsado por Biomecanics. Uno de los aspectos destacados por el informe es la convicción de que ha habido una evolución en el modelo de crianza durante la última década, en la que el acceso a información masiva ha tenido un gran impacto al dar a los progenitores más herramientas, 'lo que les hace sentirse más preparados' y poder anticiparse a los problemas '. Al mismo tiempo, las madres y padres consideran que, si bien 'ahora hay más evidencia científica sobre los modelos de crianza', 'tomar decisiones resulta complicado por la existencia de tendencias contradictorias'. Para más del 82% de los entrevistados, criar hijos en la actualidad resulta más 'desafiante', debido a que 'no está claro lo que es mejor', en contraste con el pasado, donde 'había unas reglas más sencillas y unos parámetros fijos'. Pese al papel cada vez más relevante de la información digital, para la práctica totalidad de los progenitores los prescriptores tradicionales siguen siendo su principal recurso. Así pues, el pediatra (96,4%), la madre (94,0%), la escuela infantil (94,1%) y los amigos y familiares con hijos son los prescriptores con mayor influencia. Sin embargo, en el actual contexto de dudas y contraste continuo de información, otras fuentes como los libros sobre crianza y los puntos de venta de productos infantiles ocupan un lugar cada vez más importante. Más del 69% de las madres y padres consideran internet y las redes sociales como fuentes de información relevantes sobre crianza, recursos que 6 de cada 10 consultan semanalmente. La publicación del estudio 'Crianza contemporánea y uso de redes sociales. Tensiones y emociones', también confirma el papel del instinto como herramienta para tomar decisiones adaptadas a la realidad de cada niña y niño gracias a la sensibilidad irremplazable de sus progenitores . Esta visión se refleja en algunas de las conclusiones que cierran el estudio y que muestra como para el 96,8% de los progenitores 'la información orienta, pero la decisión final es de los padres que conocen a sus hijos'. En esta línea, consideran que, ante la duda, el peso del instinto en la toma de decisiones es del 60% frente al 40% de la información. «Contrastar y actualizar continuamente información y opiniones supone una carga mental extra en la crianza de nuestros hijos. No hay una crianza más respetuosa para nuestros hijos que la que nace desde nuestro instinto y nuestro bienestar mental », afirma Joaquín García, CEO de Biomecanics.