Lo que se anticipaba como una semana complicada para el Fútbol Club Barcelona , por la visita del Bayern Múnich en Champions League primero y la salida al Santiago Bernabéu después, se ha acabado convirtiendo en días de vino y rosas para el club azulgrana. Las goleadas al ogro alemán y al eterno rival han elevado hasta el infinito la euforia en los azulgranas, que viven en una nube desde el 0-4 en casa del eterno rival . Al mismo tiempo que el clásico ha hundido al Real Madrid y ha reabierto los debates en torno a Ancelotti, la gestión de los minutos, las posiciones de los delanteros o la necesidad de fichajes, el Barça vive una fiesta. Hansi Flick se ha destapado como un estratega, los canteranos presumen de aplomo y valentía y futbolistas hace nada sentenciados como Lewandowski o Raphinha vuelven a brillar como en sus mejores días. Ni siquiera los cánticos racistas que sufrieron varios jugadores azulgranas como Lamine Yamal, Raphinha o Ansu Fati en el Bernabéu han empañado la alegría del líder de la Liga tras su golpe sobre la mesa. El peso de lo extradeportivo también ha recaído sobre el Real Madrid, que horas después de los incidentes ya anunció de forma contundente que encontraría a los responsables para llevarlos ante la justicia. Sin embargo, recientemente se ha extendido un vídeo de la celebración catalana en el vestuario visitante del Santiago Bernabéu , compartido por el propio Barcelona, en el que se puede escuchar un cántico igualmente censurable y que ha generado una nueva polémica. En el vídeo puede verse a los jugadores del Barça celebrando la importante victoria en el feudo de su eterno rival. Lo hacen cantando a coro y entre saltos el «Ser del Barça es lo mejor que hay». Pero justo antes de que los azulgranas se arranquen se puede escuchar un polémico grito rápidamente denunciado en las siempre atentas redes sociales. Alguno de los jugadores del Fútbol Club Barcelona o un miembro de su expedición en las entrañas del Bernabéu se desgañita con un «puta España y puta Madrid» . Una frase que no es secundada por el resto y enseguida queda tapada por los cánticos.
