El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Baena ha decidido congelar los impuestos para el próximo año 2025, «reafirmando así su compromiso de no incrementar la presión fiscal sobre los vecinos de Baena y Albendín». Esta decisión responde a la voluntad de «garantizar la estabilidad económica de las familias y las empresas locales, mientras continúa trabajando en mejorar los servicios públicos sin recurrir a subidas impositivas», señala el Consistorio en una nota de prensa remitida a los medios de comunicación. «Entre los impuestos que se mantendrán congelados se encuentran el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) urbano, que seguirá estando por debajo de la media provincial, consolidándose como el segundo más bajo entre los municipios de la provincia de Córdoba con más de 10.000 habitantes», indica el Ayuntamiento. Además, el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica, el IBI rústico y el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) también permanecerán sin cambios. En cuanto a las tasas municipales, el equipo de gobierno señala que el precio del agua «queda a la espera de la decisión de la Diputación de Córdoba, que en los próximos meses deberá anunciar si se producirán subidas en este servicio». «El Ayuntamiento de Baena reitera su compromiso de no aumentar la carga fiscal sobre la ciudadanía y, para continuar mejorando las infraestructuras y servicios, apuesta por obtener subvenciones y fondos procedentes de otras administraciones: este enfoque permitirá seguir impulsando inversiones sin necesidad de recurrir a incrementos impositivos que afecten a la economía local», recalca el Consistorio en su comunicado. Con esta medida, el equipo de gobierno de la localidad asegura que busca «no solo aliviar la carga económica de los ciudadanos de Baena y Albendín, sino también garantizar un desarrollo sostenible del municipio mediante la optimización de recursos externos».