La provincia de Huelva articula a lo largo de todo el año una oferta que resulta realmente irresistible para los viajeros más exigentes. Se trata de uno de esos lugares que existen en Andalucía que lo tienen prácticamente todo. Los amantes de la playa tienen kilómetros de costa dorada donde elegir, mientras que aquellos que optan por el turismo de interior y la montaña , encontrarán algunos de los parajes más bonitos y encantadores de Andalucía. A todo ello hay que unirle una gastronomía privilegiada , con algunos de los mejores productos de toda España, entre los que hay que destacar todos los derivados del cerdo ibérico, una amplia variedad en setas y pescados y mariscos de primera calidad. En Huelva, además de recorrer sus playas, perderse por sus sierras y tocar el cielo gastronómico en sus restaurantes, hay otra actividad que puede resultar fantástica para los amantes de la historia y la arquitectura . En este caso se trata de hacer una ruta por algunos de los castillos más interesantes de la sierra, más allá del que es sin lugar a dudas el más conocido de la provincia, el Castillo de Aracena. Aroche La Sierra de Huelva es un territorio que ha tenido a lo largo de la historia un notable valor estratégico, ya que ha sido la frontera del Reino de Sevilla y ha tenido también una importancia vital con las relaciones con los reinos portugueses. En este contexto, por su situación, una de las fortalezas más valiosas y conocidas es la de Aroche, que estuvo en manos árabes hasta mediados del siglo XIII, siendo conquistada por la Orden del Hospital de Juan. Fue un castillo que durante siglos se consideró como una de las fortalezas más destacadas de la zona e incluso fue destacado su papel en la Guerra de Restauración Portuguesa . Lo más curioso de este bello castillo es que a comienzos del siglo XIX, ya que decayó su uso como plaza militar, el patio de armas del castillo fue convertido en una plaza de toros que actualmente está en uso. Ahora se puede visitar tranquilamente y disfrutar de eventos tan sugerentes como la Noche de las Velas. Cortegana Uno de los castillos más interesantes de toda la provincia de Huelva, tanto por su ubicación como por su dimensión artística , es el castillo de Cortegana . Su encanto lo ha situado a lo largo de las últimas décadas como uno de los monumentos más visitados de Huelva. Es un castillo que forma parte de la línea de fortificaciones que se denominó como la Banda Gallega, y que servía para defender a las tierras sevillanas de las frecuentes incursiones portuguesas. Los datos parecen indicar que se levantó en el siglo XIII , habiendo sufrido numerosas transformaciones a lo largo de la historia, así como haber sufrido importantes destrucciones como por ejemplo la producida por el terremoto de Lisboa a mediados del siglo XVIII. Un castillo que es un lugar perfecto para disfrutar de una buena visita, que nos va a llevar directamente a los tiempos de la Edad Media , y que nos va a permitir disfrutar de un castillo que fue restaurado de manera integral en 1970. Santa Olalla del Cala En las fronteras de la sierra de Huelva con la Vía de la Plata se encuentra la población de Santa Olalla del Cala, otro lugar onubense perfecto para u na excursión de fin de semana o de un día. Allí, sobre un cerro que domina todo el horizonte, se encuentra este castillo que bien merece una visita. Es a finales del siglo XIII cuando se da la orden para la construcción de este castillo, que fue promovida por el Concejo de Sevilla , y cuya función era la de vigilar otra área de una importancia estratégica brutal. El Castillo cuenta con diez lienzos de muralla y diez torres, con una superficie de muralla que supera los 4.500 metros cuadrados , lo que nos da la medida de que estamos ante un castillo de notable importancia. Un recinto fortificado que fue restaurado en el año 2006. Castillo de Sancho IV. Cumbres Mayores De una época muy cercana al de Santa Olalla del Cala es el castillo de Cumbres Mayores, que se construyó también en virtud del Privilegio de Sancho IV de Castilla y cuya función ha sido históricamente la de dominar la Ribera del Sillo. Un castillo que se levanta en la zona y que cuenta con un total de ocho torres, y que experimentó una importante reforma en el siglo XV, en la que se recrecieron torres y lienzos de muralla. Obviamente, los castillos ubicados en las zonas de sierra son los más importantes y destacados en un recorrido de estas características, aunque en la provincia también se pueden rastrear los restos de otras fortalezas que se encontraban en lugares como Ayamonte, Cartaya, Moguer o Encinasola . Lugares en los que apenas queda nada en pie, pero en los que se puede volar con la imaginación para trasladarnos a los tiempos en los que prácticamente cada población situada en lugares estratégicos, estaba obligada a contar con un castillo o fortaleza.