El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha reunido con el consejero delegado de Stellantis, Carlos Tavares para tratar los retos a los que se enfrenta el sector del automóvil, entre ellos el impulso al vehículo electrificado y los planes de inversión que tiene el grupo de automoción internacional en España. Durante este encuentro, que se enmarca en el diálogo constructivo entre la compañía y el Gobierno de España, se ha abordado la situación de los proyectos en curso y futuros del Grupo en España, para cuya viabilidad es necesario el apoyo de las administraciones públicas . El trabajo conjunto desarrollado en los últimos meses por los equipos de Stellantis en España y el Gobierno de España, ha permitido obtener un nivel de apoyo satisfactorio, lo que contribuye a las futuras decisiones. El Grupo comunicará los avances en estos proyectos a su debido tiempo. En la reunión en la que también ha participado el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, y el director de la Oficina de Asuntos Económicos y G-20, Manuel de la Rocha, Sánchez ha tratado también temas importantes para la industria del automóvil como el de los objetivos de emisiones de CO2 de la Unión Europea, que el próximo año se endurecen, y el plan de incentivos a la venta del vehículo electrificado. En concreto, en 2025, de acuerdo con la normativa 'CAFE' (Emisiones de Combustible Medias Corporativas, por sus siglas en inglés), el objetivo de emisiones de CO2 bajará a los 93,6 gramos por kilómetro en los coches vendidos en los 27 países de la UE. Aquel fabricante que incumpla puede verse sancionado con hasta 95 euros por cada gramo excedido según la ley. Por tanto, distintos grupos automovilísticos europeos, así como países entre los que se encuentran Italia o Polonia, han pedido que estos objetivos se pospongan y se revisen el próximo año, dada la baja demanda de vehículos electrificados en el continente y las posibles multas millonarias que pueden enfrentar los fabricantes. En la reunión, Sánchez ha subrayado la importancia de la colaboración público-privada para lograr los objetivos de la transición verde y digital , al tiempo que el consejero delegado de Stellantis ha compartido los hitos alcanzados y los desafíos futuros dentro de los planes del grupo de automoción. Carlos Tavares compartió la posición del Grupo con Pedro Sánchez: Stellantis estará preparada para el cumplimiento de las emisiones de CO2 en Europa en 2025 y no pide ningún cambio. En estos momentos es de suma importancia la estabilidad en la regulación, así como el impulso del mercado para este tipo de vehículos, a través de ayudas directas a la compra, y un rápido despliegue de las infraestructuras de recarga. El presidente del Ejecutivo ha puesto en valor la apuesta del Gobierno por la electrificación del sector de la automoción, con más de 5.500 millones de euros de fondos públicos destinados a la reindustrialización del sector, en la que destaca el Perte del Vehículo Eléctrico y Conectado (Perte VEC). La última convocatoria de este proyecto estratégico, el Perte VEC III se resolverá a finales de año, explican desde el Ejecutivo. También está previsto el lanzamiento de una cuarta convocatoria, dotada con 1.250 millones de euros próximamente. En paralelo, desde el Gobierno han destacado que se continúa desarrollando la red pública de estaciones de recarga, y habiendo movilizado ya más de 1.500 millones de euros con las convocatorias lanzadas hasta la fecha de la línea de ayudas a la adquisición de vehículos eléctricos e instalación de puntos de recarga del Plan Moves, cuya última edición concluye el 31 de diciembre, y sobre la cual el sector sigue en negociaciones con el Ejecutivo para prorrogarlo o desarrollar otro plan de ayudas que incentive la demanda del vehículo eléctrico. Stellantis, que incluye marcas como Citroën, Peugeot, Opel, Fiat, Alfa Romeo o Jeep, entre otras, produjo el año pasado más de un millón de vehículos en España, y ha sido adjudicatario de 357,8 millones de euros, a través de diferentes convocatorias del Perte VEC y del Perte de descarbonización en diversos proyectos de sus tres plantas en España (Vigo, Madrid y Figueruelas en Zaragoza).
