En Málaga, una pescadera conocida en redes sociales como Noe la Peskaera ha revelado un curioso dato. Ha captado la atención de muchos de sus seguidores, interesados por conocer más sobre las antiguas tradiciones del mar y la pesca . Según sus declaraciones, existe un pescado cuya piel tiene una peculiaridad que le permite utilizarlo no solo como un producto gastronómico, sino como una herramienta de limpieza. Noe asegura que este pescado es muy valorado en su tierra y que, aunque su consumo aumenta en Navidad, está presente en las mesas malagueñas durante todo el año. Sin embargo, su particularidad no está solo en su sabor, sino en su piel, que ella describe como «muy similar a la lengua de un gato, pero al revés» . El pescado al que se refiere Noe la Peskaera es la pintarroja , una especie que destaca por su piel extremadamente áspera. Esta característica, según la pescadera, ha sido aprovechada durante generaciones para limpiar las superficies de mármol en las pescaderías. En una de sus declaraciones, Noe explicó que «antiguamente, como no había estropajos, la piel de la pintarroja se utilizaba para limpiar el mármol de las pescaderías. Tiene una piel tan áspera que lo raspa y lo lija todo ». Este dato ha despertado la curiosidad de muchos, especialmente de los más jóvenes, que desconocían este uso tradicional de la pintarroja. Además de su uso en la limpieza, la pintarroja es conocida por ser uno de los pescados más complicados de pelar. Según Noe, «para pelar una pintarroja se necesita otra pintarroja o un trapo que sea duro para poder tirar de la piel» . En este sentido, la textura de su piel la hace resistente, pero también un desafío para quienes se enfrentan a esta tarea. Noe también ha señalado que la pintarroja guarda cierta similitud con la raya, otro pescado apreciado en la cocina malagueña .