La juez que investiga a Nacho Cano por presuntos delitos contra los trabajadores extranjeros ha cambiado la condición de dos de los testigos que había citado para este jueves y que ahora, están formalmente investigados y tendrán que volver al juzgado ya con asistencia letrada. Se trata de David Hatchwell, productor Ejecutivo de Malinche y administrador de la empresa Hotel Las Descalzas S.L., donde se alojaban los becarios mexicanos desplazados a España para el musical, y de Javier Alfonso Muñoz, administrador de la escuela Jana Producciones, la que respaldaba que los jóvenes se encontraban en prácticas de formación. Según informaron a ABC en fuentes jurídicas, el cambio se ha producido en ambos casos, antes de que arrancasen las declaraciones y a instancias de la Fiscalía, que pese a haber instado que ambos compareciesen como testigos, ha propuesto a la instructora cambiarles la condición por entender que podrían haber participado en una presunta simulación de que los mexicanos estaban en prácticas de formación. El movimiento, que ha pillado por sorpresa a acusaciones y defensas, se ha producido después de que una becaria del musical relatase su experiencia como testigo en el juzgado y explicara, por un lado, que entraron como turistas en España pero luego tramitaron desde aquí el visado de estudiantes, por lo que «todo fue legal»; y, por otro, que en marzo estrenan Malinche en México, donde ya sí se desempeñarán con contrato laboral. Para la acusación particular que ejerce el letrado de la denunciante Lesly Ochoa, la testigo ha venido a refrendar así que lo de España no eran simples prácticas sino ensayos, lo que según la normativa que regula las condiciones de trabajo de los artistas, constituiría una actividad laboral. Mientras, la defensa, que ya ha anunciado su intención de recurrir esta decisión, asegura que se trata de una maniobra para dilatar la causa.
