Cualquier clásico tiene mucho que arbitrar. Y si se trata de una final donde hay un título en juego, mucho más. Pese a la clara victoria del Barcelona, el extremeño Jesús Gil Manzano tuvo abundante trabajo. En la mayoría de acciones polémicas estuvo desacertado, aunque tuvo la suerte de rectificar gracias al VAR, sobre todo en las dos jugadas más importantes. Eso le salvará de aparecer en las portadas. Tampoco estuvo acertado en jugadas donde debió mostrar segunda amarilla. A Camavinga y Vinicius por parte del Madrid , y a los jugadores del Barcelona, Íñigo Martínez y Raphinha. Ambos estaban en el banquillo y tras ser amonestados por protestar siguieron recriminando al colegiado. Gil Manzano tiene mucho más nivel que...
Ver Más
