El portavoz del gobierno municipal de Valencina de la Concepción, Joaquín Meseguer, valoró ayer la sentencia dictada por la sección 1 de la Audiencia provincial de Sevilla en la que condenan a un año y medio de prisión, a 9 años de de inhabilitación para empleo y cargo público al exalcalde socialista Antonio Manuel Suárez. El actual ejecutivo local de esta localidad señala que el PSOE había convertido el Ayuntamieto «en un cortijo» y que, en el fallo judicial, «se ha certificado que el exalcalde y su partido son el pasado, y que nuestro pueblo tenía que pasar página, y esta sentencia lo hace enterrando para siempre el cortijo en el que se había convertido el ayuntamiento». Llama la atención, según Meseguer de la Cierva, que el tribunal cita expresamente en la sentencia que «(...) considerada la prevaricación como delito de infracción de un deber, éste queda consumado en la doble modalidad de acción u omisión con el claro apartamiento de la actuación del excalde del parámetro de la legalidad, convirtiendo su comportamiento en expresión de su libre voluntad, y por tanto en arbitrariedad». Es decir, que hizo caso omiso a las sucesivas denuncias o de inacción también ante informes concluyentes de los funcionarios de la Policía Local, «comportamiento que han sufrido los vecinos de Valencina». Recuerda el actual gobierno municipal que esa misma arbitrariedad es la que desalojó al PP de la Alcaldía cuando, a través de una ilegalidad con sentencia firme, una tránsfuga fue condenada a devolver el dinero cobrado ilegalmente para darle el bastón de mando al socialista Suárez en el año 2019. «Dinero que -apunta- todavía no ha sido devuelto, privando a nuestro pueblo de un cambio que hoy se certifica que era más que necesario que nunca para erradicar conductas contrarias al lo que debe ser el servicio público y el noble ejercicio de la política», alude. Recuerda Joaquín Meseguer la operación que montó el exalcalde del PSOE, «aludiendo problemas personales y de salud cuando en realidad lo que estaba subyaciendo era el 'modus operandi' en una utilización permanente de una institución secuestrada como el Ayuntamiento, llegando a utilizar dinero público para la contratación de un profesional para la creación de una plataforma de noticias falsas para urdir una campaña de desprestigio personal al actual alcalde y su familia». Tal y como avanzó ABC el pasado mes de diciembre, el exalcalde socialista también convirtió el Consistorio de Valencina en una agencia de colocación de militantes y familiares de estos. El último episodio sucedió días antes de que dejara el cargo tras perder las elecciones en 2023 al firmar la lista provisional de admitidos y excluidos del proceso de estabilización de las limpiadoras, donde obtuvieron plaza fija la hermana de un actual concejal socialista, la mujer del secretario de organización del partido, una antigua edil o la madre de un miembro de la lista electoral.