Hablar de la salud mental sin nombrarla, contar el malestar sin palabras, expresar el bienestar con el lenguaje del cuerpo. Aprender, jugar, soltar, mirarse al espejo, expulsar los demonios. Crear en comunidad. Estos días el Teatro Central bulle más que de costumbre con el trabajo y la presentación de resultados del 'Proyecto Frenia , el último trabajo de La Rara y que estrenan estos días en el Teatro Central. Una investigación, un taller, una exposición y dos piezas sobre el escenario con el que las chicas de la compañía completan un proceso de años y que se sale de los moldes de lo puramente teatral. Dos de sus integrantes, Rocío Hoces y Julia Moyano , han comentado esta mañana con los medios de comunicación los detalles de este viaje. Les ha acompañado Manuel Llanes , director del Central, que ejerce de anfitrión y también de impulsor en su tarea de hacer del teatro perteneciente a la Consejería de Cultura y Deportes de la Junta de Andalucía, mucho más que un mero contenedor de propuestas. «Ha de ser un lugar de trabajo mucho más vivo y proyectado a la ciudad. Este proyecto es de lo más interesante de la temporada porque acerca estas instalaciones a los colectivos y nos mostramos cercanos a los retos y vivencias contemporáneos», ha subrayado. Ambas pretensiones se funden en 'Frenia' que, según han explicado, se sustenta en tres patas fundamentales. La primera, con el mismo nombre, es una propuesta expositiva y perfomática que puede visitarse desde este fin de semana en el hall del teatro de la Cartuja y cuyo trabajo de investigación ha dado como resultado la tercera parte: 'Órgia' el espectáculo que La Rara estrenará el sábado 25 de enero (a las 19 horas). Enmedio, único e irrepetible, 'Saltar la tapia' , proyecto de mediación artística que culminará el viernes 24 con dos pases a las 18:30 y a las 20:00. Ahí no están solas, sino que «se cuelan» entre un grupo de 41 jóvenes de edades comprendidas entre los 16 y los 18 años del IES San Jerónimo de Sevilla y del IES Carmen Laffón de San José de la Rinconada para abordar el tema de las dolencias de la mente. Cinco días de convivencia en los que de manera natural, sin prejuicios ni directrices irá gestándose una propuesta a modo de conclusión que podrá verse el viernes. Las tres patas de 'Frenia' tienen en común el manicomio de Miraflores, una «herida abierta» de la ciudad de la que, según Hoces y Moyano, «no ha habido reparación». Tres años llevan investigando sobre un psiquiátrico que «se cerró, se hizo lo que se pudo pero no pasó nada más. Es un tema que tiene mucho vínculo aún la ciudadanía, pero no hubo ni una disculpa a nivel institucional», ha remarcado Rocío Hoces, que lamenta que «no haya cultura de la reparación y de la memoria histórica». Una maqueta de esas instalaciones elaborada por el equipo AF6 Arquitectura siguiendo los planos originales, recuerda en esta exposición los desmanes que se realizaron entre esas paredes desde su inauguración en 1890 hasta casi un siglo después. A través de las luces se recrea también las vidrieras del manicomio y también se recogen documentos sonoros. Testimonios de quienes vivieron algunos de esos terribles episodios, como el de una trabajadora que cuenta cómo una usuaria se derrumbó al mirarse por primera vez al espejo -allí no tenían- después de 20 años. Esta exposición se podrá visitar gratuitamente todos los días de función a partir de las 18:00, independientemente de que se tenga entradas para los espectáculos. Aunque no tenga nada ver con el proyecto paralelo con los jóvenes, éste sí toma el nombre de algo vinculado con el hospital psiquiátrico sevillano. 'Saltar la tapia' fue también el mítico festival celebrado en el psiquiátrico de Sevilla en los años ochenta en el que, por primera vez, se permitía entrada libre a la ciudadanía. Apertura y libertad podrían definir certeramente en qué consiste esta convivencia con los chicos que se ha desbordado en apenas dos jornadas por la implicación de sus integrantes. «Estas nuevas generaciones, por contra a la nuestra, cuentan con una sintaxis nueva además de la palabra, el cuerpo», ha destacado Llanes. «Se ha dibujado una topografía de la adolescencia, el dolor humano que han narrado esos cuerpos ha sido brutal», ha apostillado Hoces. La artista se ha emocionado especialmente al hablar ante los periodistas de la lacra del suicidio entre los jóvenes. «No ha salido el tema aún con estos chicos, pero ellos caminan con esa posibilidad, lo ven cercano y normalizado. Hay otro paisaje diferente a cuando nosotras teníamos su edad». Por último, el 25 de enero a las 19:00 tendrá lugar el espectáculo para cinco intérpretes, 'Órgia' en el que cinco mujeres de más de cuarenta años y de clase media se asoman a la historia reciente de la salud mental y, tras ver los horrores que las precedieron, comparten en escena lo que les pasa a ellas ahora. «No ignoran sus privilegios, pero saben que la conmoción acumulada durante cincuenta y siete días en estado de alarma, la confusión por haber llegado tarde a casi todo y la ansiedad que conlleva la autoexplotación permanente mientras sonríen, meten barriga y piden perdón, las están enfermando», señalan las creadoras. El montaje combina tres líneas temporales y mezcla diferentes lenguajes escénicos: Por un lado, Verbatim –una forma literal de teatro documental–, apoyado en la experiencia de Lucía Miranda, directora de 'The Cross Border'; por otra parte, la exploración de las posibilidades de la narrativa transmedia que ya emplearon en la versión virtual de 'Si yo fuera madre'; y, por último, la autoficción plural que apela al público de forma íntima que ya emplearon en su anterior pieza. 'Órgia' «es un acto ecléctico que reúne historias de vidas secuestradas y maltrechas de mujeres que ya no lo pueden contar, relatos íntimos de quienes lo vivieron y quieren contarlo y una verbena de voces de mujeres ávidas de ser cuerpo, uno sólo, y hacerlo saltar». Tras la función La Rara, realizará un encuentro con el público. La obra cuenta con el Premio Lorca Revelación Ex Aequo 2024 y la Mención especial del jurado en la Feria de Teatro y Danza Palma del Río 2023. La Rara es la compañía de Julia Moyano y Rocío Hoces, unidas por la búsqueda de una coherencia artística y vital. 'Si Yo Fuera Madre', estrenada en 2020 en el Central, fue su primer trabajo conjunto.
