Y como no hay dos sin tres, el 'club de damnificados' de Ana Obregón ha sumado una nueva adición al incluir a la vedette francesa Marlène Mourreau , quien ha hablado de su negativa experiencia de trabajar con ella para unirse a nombres como los de Nia Correia y María Pombo en la denuncia de las supuestas «malas formas» de la bióloga . La polémica no cesa y cada vez son más las voces que sacan a relucir supuestos encontronazos ocurridos en algún momento y en algún lugar, y siempre con Ana Obregón. Todo comenzó con el conflicto de Nia Correia por un supuesto trato despectivo durante la grabación de un sport para las Campanadas de Televisión Española en 2022, siguió con otra narración de la influencer María Pombo , a cuenta de una 'guerra de perfiles', y ahora llega Marlène Mourreau . La vedette francesa se ha decidido a compartir su propia experiencia, y de nuevo negativa, con la bióloga y para ello ha sacado de su memoria un episodio ocurrido hace décadas en Televisión Española , un momento en el que Ana Obregón se mostró intransigente y caprichosa, dos perfiles en los que antes abundaron Nia Correia y María Pombo. «Tuvimos que hacer un dúo de ' Los hombres las prefieren rubias ' y yo era más parecida a Marilyn Monroe, pero Ana se empeñó en ser ella y no quiso hacer otro papel», ha comenzado la artista francesa. Según su testimonio, y a pesar de que estar convencida de que ella era físicamente más parecida a la icónica actriz estadounidense, Ana Obregón insistió en quedarse para ella el rol principal , relegando a Marlène Mourreau al papel, menos lucido, de la morena Jane Russell. El relato de la vedette ha continuado con una inequívoca valoración de lo que supone compartir un proyecto junto a la bióloga: « Es difícil trabajar con ella. Va de estrella y le hacen todos sus caprichos ». Y también ha advertido que lo mejor para estar con Ana Obregón es evitar conflictos y mostrarse lo más profesional posible. « Yo cobro y adiós », esa es la actitud a adoptar, según ella. Eso sí, aquel episodio se le ha quedado bien grabado a pesar de haber transcurrido ya 30 años desde aquello y ha criticado la falta de flexibilidad con la que supuestamente se comporta la presentadora, « como una niña de 20 años » que se aferraba a «su imagen de diva» de la televisión española. «Siempre consigue lo que quiere y le dan la razón», ha señalado. El nuevo relato de Marlene Mourreau alimentan una controversia inaugurada por Roberto Herrera al afirmar que Ana Obregón había tenido un comportamiento «soberbio» con Nia Correia, haciéndola «llorar» durante la grabación del anuncio promocional de las Campanadas 2022. Posteriormente llegó el conflicto por María Pombo, contado así por el programa ‹Socialité': «Ana la lio porque se enteró de que María tenía el mismo lado bueno que ella. Tenían que sentarse en una mesa de dos, ella decía que era su lado malo y que se cambiara María, que era la novata. María tuvo que acabar cediendo, tuvieron que sentarla al otro lado . Ana, en vez de agradecérselo, se comportó como si María no existiera», explicaban. No obstante, la influencer restó trascendencia al suceso, aunque no lo desmintió. «Esto fue hace muchísimos años... Lo que yo recuerdo es que las dos teníamos el mismo lado y que las dos queríamos el mismo ». Y añadió: «Todas discutimos por nuestro lado... De todas formas, si hubiese habido algo, es una persona que lo ha pasado muy mal y que le ha pasado lo peor que puede pasar a una madre, entonces jamás la juzgaría». Ana Obregón ha negado todas las acusaciones y ha defendido en todo momento su profesionalidad, insistiendo en su buena relación con sus compañeros de trabajo. Sin embargo, no dejan de salir testimonios que afean su conducta con sus compañeros.
