Cataluña da un paso más al frente en la restricción del uso de teléfonos móviles en el sistema educativo. Un año después de que la Consejería de Educación vetara su uso en las aulas (se prohibió totalmente en Primaria y se permitió solo en secundaria y en el Bachillerato pero con fines educativos), la consejera Esther Niubó , que al asumir el cargo se comprometió a revisar la medida de cara al próximo curso, ha anunciado hoy que su departamento plantea prohibir el móvil en todas las etapas educativas, sin excepciones, es decir, incluso aunque los fines sean pedagógicos. Esta será la propuesta que Niubó trasladará al grupo de expertos creado por el departamento y a los que su departamento acaba de encargar un informe para fijar la estrategia dirigida a llevar a cabo éste y otros cometidos. El plan de la Generalitat pasa por sacar de las aulas de ESO y Bachillerato el dispositivo (ahora se utilizaba para fines pedagógicos) y plantea además retirar las pantallas en las aulas hasta los seis años. La consejera ha informado hoy sobre la creación de la Comisión para una Digitalización Responsable , integrada por 50 expertos y que se encargará de revisar el uso de las pantallas en las aulas y analizar sus efectos en la educación. También se le encargará que «evalúe la restricción de las pantallas en la Educación Infantil». Según ha avanzado Niubó, se prevé que los trabajos de la comisión finalicen «a finales de junio» y habrá, de cara al próximo curso, una guía de buenas prácticas y recomendaciones para los centros educativos y los profesionales, y otra para las familias. La comisión contará con 50 miembros -entre profesionales y representantes de organizaciones sobre desarrollo digital y referentes , directores de centros y docentes- que aportarán su experiencia para «ayudar a hacer un diagnóstico correcto». Se constituirán dos grupos: el primero será de profesionales de diferentes ámbitos de trabajo que «conocen los efectos de los usos de los dispositivos y entornos digitales y sus consecuencias» y que hará el diagnóstico de la situación y las problemáticas que se han detectado en diferentes contextos. El segundo grupo contará con profesionales de ámbitos socioeducativos que «conocen el uso que se hace de las pantallas y de los entornos digitales» en el contexto escolar, y partirá del diagnóstico inicial y elaborará una parte que rinda cuentas de la situación de los usos de las pantallas por etapas educativas. El coordinador de la comisión es el pedagogo Màrius Martínez y, entre los miembros, están el biólogo David Bueno ; la profesora universitaria Mar Camacho -autora del Pla d'Educació Digital de Catalunya 2020-2023-; la socióloga Alba Castellví ; la presidenta de la Societat Catalana de Pediatria, Anna Gatell . A juicio de Niubó con esta nueva comisión «se da un paso más» en la regulación que ya había hasta ahora, que afectaba exclusivamente a los móviles, ya que ahora se extiende a todas las p antallas y a los dispositivos y recursos digitales en el aula. Actualmente en la Secundari a se permite el móvil cuando se justifica que un uso pedagógico y didáctico, por lo que con esta nueva comisión se quiere valorar si «sería mejor eliminarlo directamente del conjunto de las aulas y poder utilizar otros dispositivos para hacer esas tareas», informa Ep. Además, se ha encargado una auditoría a Ivàlua para «evaluar cómo se están utilizando actualmente los dispositivos» y qué valoración hacen. «Es necesario establecer unas pautas sobre el uso de las pantallas; por ello nos proponemos pararnos a pensar para actuar, para encontrar el equilibrio entre la necesaria alfabetización digital -la necesidad de saber identificar una 'fake new'- y garantizar su uso responsable», ha precisado la consejera.