La 97ª, como cada edición de los Oscar, tuvo espacio para la reivindicación. Y a la del pueblo palestino le dieron voz un colectivo palestino-israelí formado por los directores Yuval Abraham, Basel Adra, Hamdan Ballal y Rachel Szor al recoger el premio a mejor largometraje documental, acusando de genocidio a Israel y de complicidad al gobierno estadounidense. 'No Other Land' , el filme sobre un joven activista que lucha desde su infancia contra la expulsión masiva de su comunidad por los israelíes, se impuso durante la ceremonia a las otras cuatro nominadas, ' Porcelain War', ' Soundtrack to a Coup d'Etat' , 'Sugarcane' y 'Black Box Diaries ', tras triunfar en la Berlinale. En su discurso, el activista y periodista palestino Basel Adra destacó «el reflejo de la dura realidad que hemos estado soportando durante décadas», haciendo un llamamiento «a detener la injusticia y la limpieza étnica de Palestina». «Hace dos meses me convertí en padre y espero que mi hija no tenga que vivir lo que yo vivo. Siempre con miedo de que demuelan nuestros hogares. Mi comunidad sufre todos los días por la ocupación», aseveró el realizador. El cineasta recordó que para realizar el documental se unieron palestinos e israelíes para que sus voces sean más fuertes. «Hay una solución política sin supremacía étnica, con derechos nacionales para ambos pueblos», agregaron, con mensaje directo a Estados Unidos. «La política exterior de este país ayuda a bloquear este camino. Por qué? ¿No ven que están entrelazados? Mi pueblo solo puede estar seguro de verdad si los palestinos son libres de verdad. No hay otra forma de hacerlo, no hay otra forma de vivir».
