La particular raza de perro que poblaría el mundo en caso de que los humanos llegaran a desaparecer de la faz de la Tierra
En medio de la hipotética desaparición abrupta de la humanidad, aparece una incógnita fascinante, pero poco examinada: ¿cuál sería el destino reservado para nuestros leales compañeros caninos?
Este interrogante fue abordado por el doctor Dan O'Neill, cuya experiencia como profesor de epidemiología animal en el Royal Veterinary College de Londres le otorga un profundo entendimiento de la dinámica entre humanos y perros.
En un reciente reportaje del Daily Mail, O'Neill ofrece una visión única sobre la posible evolución de esta especial relación en un escenario postapocalíptico.
¿Qué raza de perro quedaría si los humanos desaparecieran?
Según lo publicado, en el escenario planteado por el doctor O'Neill, él sugiere una transformación notable en la población canina ante la ausencia humana.
En primer lugar, los perros comenzarían a reproducirse indiscriminadamente, dando lugar a una mezcla de razas que gradualmente eliminaría características consideradas poco saludables o "antinaturales", como las caras planas de los bulldogs o los torsos largos de los teckels.
Los perros callejeros podrían ser un modelo de cómo luciría el futuro canino si los humanos desaparecieran. (Foto: Freepik)
Este proceso evolutivo conduciría a la emergencia de un modelo canino singular, al que O'Neill ha apodado la "raza goldilocks (ricitos de oro)", caracterizada por su perfección y ausencia de anomalías causadas por la intervención humana.
Para O'Neill, las razas de perros son una invención humana, y la mezcla genética resultante eliminaría las distinciones entre ellas. Este nuevo modelo canino podría asemejarse a los perros callejeros, comunes en la India y presentes en varios continentes, que mantienen una apariencia similar y se asemejan a los perros de épocas pasadas.
Este hipotético perro del futuro próximo sería ágil y saludable, alimentándose de carroña y manteniéndose en forma gracias a su naturaleza de buscador de alimentos. La obesidad, común en las mascotas actuales, sería un problema del pasado para esta nueva estirpe canina, ya que su forma de vida activa y su dieta variada evitarían este problema.
Para O'Neill, es esencial reconocer y permitir que los perros satisfagan sus necesidades naturales básicas, como el ejercicio y el descanso, sin las restricciones impuestas por la conformación extrema de ciertas razas.
La desaparición de las razas de perros sería un proceso gradual que ocurriría en un lapso de cinco años sin la intervención humana. (Foto: Freepik)
¿Cómo sería el nuevo perro?
Según las declaraciones del experto, el perro de la "raza goldilocks (ricitos de oro)" adoptaría rasgos distintivos que lo diferenciarían de sus ancestros de razas variadas:
Hocico pronunciado: con el tiempo, el hocico del nuevo perro se volvería más alargado y estrecho, una característica común en razas con historial de caza. Esta elongación favorecería su sentido del olfato, al proporcionar más espacio para las neuronas receptoras olfativas.
Patas largas: las extremidades alargadas del "Ricitos de Oro" le conferirían una zancada amplia, facilitándole recorrer distancias más largas y a mayor velocidad. Esta adaptación sería beneficiosa para la caza y el desplazamiento.
Cola larga y curvada: una cola naturalmente larga y con una curvatura distintiva sería otro rasgo característico de este perro saludable. Esta forma de la cola puede ser un indicador de su bienestar y vigor.
Orejas erguidas o puntiagudas: las orejas en posición erecta o puntiagudas aumentarían la capacidad del perro para detectar vibraciones en el aire, mejorando su habilidad para localizar presas. A diferencia de las orejas largas y caídas, las orejas erguidas reducirían el riesgo de infecciones auriculares, promoviendo la salud del animal.