Cuánto cobran Milei y sus ministros: la insólita situación que puede suceder a partir de julio
Con más de seis meses de su haber asumido, el presidente Javier Milei aún no autorizó una suba de salarios para altos funcionarios del Ejecutivo. Esta decisión de freezar los sueldos de 'la casta política' también se replicó en los primeros meses en el Congreso, pero la decisión de la titular del Senado, Victoria Villarruel, de dar luz verde a los aumentos de la dieta en su cámara comenzó a generar un efecto presión en Diputados, ámbito que preside el libertario Martín Menem, más reacio a ese tipo de incrementos.
Incluso, el riojano se vio forzado a autorizar los primeros aumentos para los diputados nacionales. Según se dio a conocer el mes pasado, firmó una resolución en la que se aplica una suba de 80% en tres cuotas, y un plus que redundó en que los legisladores recibieran en sus cuentas bancarias una suma total de $ 750.000. Una forma de reconocer que las premisas doctrinarias de parálisis total de las dietas tienen, en algún momento, un fin.
Para los funcionarios del Ejecutivo la situación dista de ser certera. En una entrevista concedida a TN, el Presidente reconoció que "tiene freezados los sueldos" y que "un senador está ganando el doble". "Es un momento difícil para la Argentina y hay que acompañar el esfuerzo que están haciendo los argentinos de bien", indicó.
Cuánto cobra Milei, Villarruel y los ministros
Efectivamente, el Presidente, la Vicepresidenta y los funcionarios de rango de Ministro, Secretario y Subsecretario no tienen computado aumentos salariales desde que los libertarios arribaron a la Casa Rosada. El único antecedente de un intento de incremento se dio en marzo, cuando Armando Guibert, el secretario de Transformación del Estado y Función Pública, fue el ideólogo de aplicar un aumento salarial a toda la plana mayor del Ejecutivo.
A pesar de que era el encargado para hacerlo, cuando aquello se dio a conocer en los medios el jefe de Estado sobreactuó indignación y dijo que no se había enterado de esa medida pese haberlo firmado él mismo. Eso desembocó en el despido de ese funcionario, un fuerte enojo con su superior, Nicolás Posse, y la decisión de no aumentar hasta nuevo aviso.
El Cronista pudo constatar esto último a través de un pedido de acceso a la información pública; incluso, a pesar del aumento propuesto por Guibert durante el mes de marzo, el Decreto 235/24 retrotrajo esa medida y produjo que los funcionarios no cobraran más de lo estipulado.
El Presidente de la Nación cobra en bruto un total de $ 4.066.018,15, la cual consta, mayoritariamente de los conceptos por responsabilidad en el cargo. La Vicepresidenta de la Nación un total de $ 3.764.820,82; mientras que quienes tienen jerarquía de Ministro perciben $ 3.584.006,00.
Este rango lo tienen el jefe de Gabinete, los ministros y los secretarios presidenciales como Karina Milei (General), Javier Herrera Bravo (Legal y Técnica), Eduardo Serenellini (Prensa) y María Ibarzabal Murphy (Planeamiento Estratégico Normativo).
El insólito dato de los sueldos estatales
En un escalón más abajo están los rangos de Secretario y Subsecretario, que cobran en bruto $ 3.282.709,47 y $ 2.981.513,49. Hay un punto interesante en relación a estos últimos: es muy probable que en la próxima negociación paritaria estatal sean rebasados por los Directores Generales, que están por debajo suyo en la escala jerárquica.
Esto se debe a que desde los subsecretarios para arriba los aumentos deben regirse por resolución del propio Ejecutivo, mientras que los rangos inferiores se mueven bajo los paritarias que negocian los gremios estatales (quien establece la pauta de ese incremento generalmente es UPCN).
De producirse esto último se daría un movimiento contraintuitivo: en el afán de congelar los sueldos jerárquicos, un Subsecretario cobrará menos que un Director. De continuar así en los próximos meses, también pasará que superarán a los secretarios de la Nación y que, incluso, directores de menor rango como los "de línea" cobren más que un subsecretario.
Aunque por fuera de los altos cargos del Ejecutivo hay mayor variabilidad de los montos percibidos; un director general cobra $ 2.600.000 en bruto (solo $ 400.000 corresponde al apartado de salario básico), mientras que un director de línea recibe cerca de $ 1.900.000 en bruto.
No habrá que esperar mucho para que se dé este fenómeno: los gremios estatales de UPCN y ATE reabrieron las conversaciones con los responsables del Ejecutivo (esa función ahora le compete a Rosana Reggi, subsecretaria de Desarrollo y Modernización del Empleo Público y ayer se concretó un primer encuentro demorado que pasó a cuarto intermedio ante la falta de propuestas completas del Gobierno.
Desde el Gobierno indican que no habrá mayores precisiones de cuándo se dará el próximo aumento a las altas esferas del Ejecutivo. Marcan que, a diferencia de lo que le sucede a Menem en Diputados o a Villarruel en el Senado, hay temor en el Gabinete por alzar la voz para insistir con un incremento. El Cronista se hizo eco de funcionarios que por lo bajo preferían comenzar ese descongelamiento.
Una hipótesis muy factible que se maneja es que Federico Sturzenegger sea quien se quede con esas atribuciones. El economista y asesor del jefe de Estado se haría cargo de varios "ravioles" que hoy están bajo la órbita de Guillermo Francos: uno de ellos es la secretaría (y sus áreas inferiores como la que preside Reggi) que quedó fauna tras el desplazamiento de Armando Guibert, que se encarga de determinar los incrementos de los altos empleados y de la planta permanente, transitoria y otros regímenes.