Fuerte movimiento de dólares en los bancos: qué hay detrás

El pago de renta de la deuda soberana en dólares interrumpió la dinámica de los depósitos privados en moneda extranjera. Los más de u$s 4300 millones que el ministro Luis Caputo volcó al mercado frenaron la tendencia bajista y generaron volatilidad en las cuentas bancarias, un efecto considerado como transitorio, que terminará en reinversión de los fondos.

El drenaje constante que exhiben los depósitos privados en dólares desde noviembre, tras la finalización del blanqueo de capitales en efectivo, se vio interferido el jueves pasado, día en que el Tesoro Nacional abonó los vencimientos de amortización e intereses de los títulos de deuda soberana en moneda extranjera.

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La interrupción de la tendencia se dio con un repunte de u$s 526 millones en una sola jornada, de acuerdo con los últimos registros del Banco Central que se dieron a conocer en las últimas horas. El movimiento captó la atención del mercado y reflejó que una parte de los bonistas que recibió la renta ese mismo día envió los fondos a sus cuentas bancarias.

El comportamiento de los bonistas está relacionado con dos factores. Por un lado, la posible decisión de atesorar esa renta en sus cuentas bancarias para ahorrarla, consumirla o retirarla. Por otro lado, el desconocimiento de muchos respecto a que ya no es necesario enviar el monto al banco para volver a ingresarlo al bróker de bolsa si quieren reinvertirlo.

Desde mediados del año pasado, la normativa que obligaba a enviar al banco los dólares provenientes de dividendos y rentas de capital e intereses de bonos quedó exceptuada para los 15 primeros días después del cobro y aplica por completo sólo para las divisas que provengan de ventas de activos en pesos contra dólares, como operaciones de dólar MEP.

Pero el levantamiento parcial de la normativa no es conocido por todos los inversores. En el mercado, muchos aún acostumbran a hacer la transferencia de las divisas a sus cuentas bancarias y luego volver a enviarlas al bróker de bolsa con el objetivo de reinvertirlas en otros activos, dinámica que en parte habría explicado el repunte de los depósitos el 9 de enero.

De hecho, el stock de depósitos privados en dólares cayó al día siguiente, lo que indica que parte de las fondos enviados fueron devueltos rápidamente a a los brókers para reinvertirlos, aunque una parte pudo haberlos retirado del sistema. La baja neta del viernes fue de u$s 59 millones, por lo que el total de las tenencias del sector privado descendió a u$s 31.930 millones.

Entre los posibles movimientos realizados por los bonistas, el mayor peso se le asigna a la reinversión. De hecho, de acuerdo con Tomás Ambrosetti, director de Guardian Capital, desde el pago que se realizó el jueves pasado se observa una fuerte inclinación por parte de los inversores locales hacia volver a colocar los fondos en activos financieros.

Ambrosetti estima que en el corto plazo se mantendrá la decisión de reinversión, lo que debería ayudar a mantener al riesgo país en los niveles actuales, por debajo de los 600 puntos básicos, o generar una mayor compresión, en el mejor de los casos.

"Esperamos que el incremento en los depósitos privados en dólares disminuya gradualmente en los próximos días. Creemos que, una vez completado el proceso de pago de amortización e intereses a los bonistas, la afluencia de fondos hacia las cuentas bancarias se estabilizará", señala el equipo de research de Balanz Capital.