Se presentó una sola oferta por la Hidrovía: cómo sigue la licitación central para el comercio exterior
En un escenario de alta expectativa, este miércoles se conocieron las propuestas de las empresas que competirán por la licitación de la hidrovía y, pese a los cuestionamientos, el Gobierno prevé continuar adelante con la renovación de la concesión de la vía troncal del comercio exterior de la Argentina por 30 años.
De manera sorpresiva, este medio día se conoció que sólo la empresa belga Dredging, del grupo DEME, se presentó a la Licitación Pública Nacional e Internacional 1/2024 para realizar las obras de dragado y balizamiento del corredor que marca el ritmo del comercio internacional de la Argentina.
La firma fue la primera en accionar judicialmente contra la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables y solicitar la "suspensión inmediata" al plantear un direccionamiento de los pliegos por parte del Gobierno para una empresa en particular.
La denuncia fue desestimada por la Justicia, que consideró que "para poder considerar la ilegalidad articulada en este caso se precisa de un mayor conocimiento de la cuestión aquí debatida, requiriéndose el ofrecimiento de pruebas".
Ahora ingresará a un proceso de análisis que no tiene plazos pero, sin embargo, está sujeto a impugnación en caso de que algún actor lo considere.
Sobre la validez de la licitación a la que sólo se sometió una firma, fuentes del sector explicaron a El Cronista que si bien no hay razón para desestimar la licitación por único oferente -siempre que cumpla con todos los requisitos del pliego-, la decisión de avanzar con la firma DEME "es política".
El riesgo que se advierte en esta situación es que, por diversas razones la empresa abandone el proceso y genere un vacío en el proceso de licitación, lo que se traduce en pérdida de tiempo para el inicio de la nueva concesión.
En línea con las primeras reacciones en el ámbito oficial, que sugieren que "siempre se dijo que, si había una sola oferta, sea la que sea, se iba a dar de baja la licitación", desde el sector privado también indican que "con una sola presentación la van a anular o declarar desierta".
Este martes, la Procuraduría de Investigaciones Administrativas (PIA) advirtió por "graves irregularidades" en el procedimiento licitatorio de la Hidrovía y, en una extensa presentación, marcó que "la etapa de elaboración de los pliegos es crucial y de suma importancia, por cuanto los errores u omisiones en que se incurre al redactar sus cláusulas pueden acarrear consecuencias de suma gravedad".
Con todo, en lo inmediato, se espera que el Gobierno realice una compulsa de precios para los trabajos que se están realizando "mientras se realiza una revisión del pliego".
Poca competencia
"Lo más probable es que no sigan con las aperturas de los sobres 2 y 3", señaló un empresario del sector que sigue hace años el futuro de la licitación.
Como antecedente, indicó que, en 2023 DEME presentó una "agresiva" oferta para el dragado del Río de La Plata, con un costo 30% menor de peaje que el que se pagaba de 3,06 u$/trn.
La licitación pública número 6/2023 contaba con un presupuesto de $40.421.572.953 pesos y el proyecto que finalmente no se concretó, contemplaba dos etapas: una para lograr una profundidad de 11 metros y otra para el dragado.
Uno de los gigantes mundiales, CCCC Shanghái Dredging (de las siglás China Communications Construction Company Limited) una empresa controlada por China Communications Construction Group (CCCG), quedó fuera de la licitación que excluye empresas estatales extranjeras.
Por su parte, la brasileña DTA Engenharia advirtió sobre "requisitos técnicos inusuales e incompatibles" que favorecerían al actual concesionario
Infraestructura clave
El corredor, por donde transita el 80% del comercio exterior de la Argentina viene siendo blanco de debate desde hace 15 años, cuando se venció la primera concesión de la hidrovía Paraguay-Paraná que fue concesionada a la firma belga Jan de Null en asociación con la argentina EMEPA, en los 90´.
Desde entonces, los sucesivos gobiernos de distinto color político, fueron prorrogando el permiso, hasta que la gestión anterior pasó el control a la Administración General de Puertos (AGP) que recientemente fue disuelta por Javier Milei.
En reemplazo, se creará la Agencia Nacional de Puertos y Navegación (ANPYN), que absorberá las funciones y recursos de la AGP y de la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables.
En el interín, mientras se define el nuevo concesionario, el Estado cobra el peaje y, como contrapartida terceriza a privados las obras de dragado, indispensables para mantener la navegabilidad de los buques.
Nueva licitación
La nueva licitación es un negocio que se estima en 410 millones de dólares anuales y 12 mil millones de dólares para el contrato total a 30 años, según señalan fuentes del sector privado.
Se trata de una vía navegable de más de 3.400 kilómetros que atraviesa 5 países, 79 puertos y que representa la principal ruta comercial de la Argentina, sobre todo para las exportaciones del complejo agroindustrial de la zona conocida como "Gran Rosario".
La licitación actual consiste en concesionar a una empresa privada por al menos 30 años las obras de dragado y balizamiento de la hidrovía, cuestión que va a definir qué tipo y tamaño de barcos podrán navegar por el Paraná y si los buques graneleros podrán transitar con la carga completa o tendrán que seguir completando carga en los puertos de Quequén o Bahía Blanca, como sucede actualmente.
Tanto la profundidad a la que se draga el río y el calado navegable son aspectos fundamentales para ganar eficiencia logística y bajar el costo del flete internacional, algo que se viene solicitando tanto de la actividad agropecuaria como de la industria, particularmente por las cargas de aluminio y acero que se despachan por este corredor.
Ese costo, resulta central no sólo para hacer más competitivo el costo de las exportaciones sino, además, mejorar el de las importaciones, que finalmente recae sobre el producto local.