El FMI pide a EE.UU. frenar el déficit mientras el plan de Trump genera miedo por la deuda
Una alta funcionaria del Fondo Monetario Internacional instó a Estados Unidos a reducir su déficit fiscal y abordar el incremento de su deuda en un momento de preocupación por los planes del presidente Donald Trump de implementar drásticos recortes de impuestos.
En declaraciones al Financial Times esta semana, Gita Gopinath, primera subdirectora gerente del FMI, aseguró que "los déficits fiscales de EE. UU. son demasiado grandes y deben reducirse".
También advirtió que la mayor economía del mundo aún se veía afectada por un nivel de incertidumbre "muy elevado" en materia de política comercial a pesar de los "acontecimientos positivos", como la reducción de los aranceles a China por parte de la Administración Trump.
Las declaraciones de Gopinath se produjeron después de que Moody's rebajara la calificación crediticia AAA a EE. UU. debido a la preocupación por el aumento de la deuda del país. La propuesta de Trump de prolongar sus recortes de impuestos de 2017 más allá de este año aumentó esas preocupaciones y despertado inquietud entre los inversores.
La Administración afirma que los recortes, sumados a la desregulación, se amortizarán con un mayor crecimiento, pero ni a Moody's ni a los mercados financieros les convence la idea. La agencia de calificación anunció la semana pasada que la legislación propuesta, a la que Trump llama "el gran y hermoso proyecto de ley", elevaría el déficit estadounidense del 6,4 % del año pasado a casi el 9 % para 2035.
Gita Gopinath, primera subdirectora gerente del FMI, aseguró que "los déficits fiscales de EE. UU. son demasiado grandes y deben reducirse". Foto: Archivo.
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, declaró el domingo a NBC que la rebaja de Moody's era "un indicador rezagado" y responsabilizó de la situación fiscal a la Administración Biden. Añadió que el gobierno estaba "decidido a reducir el gasto y a impulsar el crecimiento de la economía". Anteriormente, Bessent había dicho que reduciría el déficit al 3% para el final del mandato de Trump.
Gopinath señaló que la relación deuda/PIB del país va en aumento y añadió que "deberíamos tener una política fiscal en EE. UU. consistente con la reducción gradual de la deuda/PIB". La deuda pública del gobierno federal ascendió al 98% del PIB en el año fiscal 2024, en comparación con el 73 % de la década anterior, según la Oficina de Presupuesto del Congreso.
Aunque el FMI declaró el mes pasado que esperaba que el déficit fiscal estadounidense retrocediera este año a medida que aumentaran los ingresos por los aranceles, esas proyecciones no consideraron el proyecto de ley fiscal de Trump, que se está tramitando en el Congreso. Gopinath añadió que Bessent ha acertado al hacer un llamamiento claro para reducir los déficits fiscales.
Trump está presionando a los republicanos de la Cámara de Representantes, donde cuenta con una mayoría ajustada, para que apoyen la legislación, argumentando que, de lo contrario, aumentaría la carga fiscal de los votantes.
La preocupación por el déficit y la rebaja de la calificación crediticia de Moody's depreciaron el dólar, impulsado los precios a la baja y los rendimientos al alza en el mercado de bonos del Tesoro. El rendimiento de los bonos del Tesoro a 30 años subió el lunes al 5,04%, su nivel más alto desde 2023.
Un mayor déficit significa que el gobierno tendrá que vender más deuda en un momento en que los inversores extranjeros y nacionales han comenzado a cuestionar la estabilidad del mercado estadounidense.
Las anteriores proyecciones del FMI no consideraron el proyecto de ley fiscal de Trump, que se está tramitando en el Congreso. Foto: Archivo.
En abril, el FMI recortó su pronóstico de crecimiento para Estados Unidos en casi un punto porcentual, al 1,8% en 2025, mientras que redujo su previsión de crecimiento global al 2,8%, al incorporar el impacto de los aranceles de Trump.
Desde entonces, Trump ha anunciado drásticos recortes a los aranceles estadounidenses. De hecho, China y Estados Unidos acordaron rebajar sus respectivos aranceles en 115 puntos porcentuales durante 90 días.
"La tregua arancelaria con China es un avance positivo", declaró Gopinath, que también celebró el acuerdo entre Estados Unidos y Reino Unido. Sin embargo, insistió en que el arancel estadounidense se mantuvo muy por encima del año pasado y que los elevados aranceles a China solo se habían congelado.
Gopinath recordó que las cifras del PIB del primer trimestre se ajustaron aproximadamente a las expectativas del FMI y añadió que los datos seguían siendo difíciles de interpretar porque las empresas se habían apresurado a hacer acopio de los suministros antes de la introducción de los aranceles de Trump.
"Pasará un tiempo antes de que los efectos de todos estos acontecimientos se reflejen en los datos. Es muy positivo poder contar con aranceles más bajos que los que asumimos en abril, pero existe un alto nivel de incertidumbre, y tenemos que ver cuáles serán los nuevos aranceles", concluyó.