Ni sal ni aceite: qué se comienda agregar al arroz para cocinarlo
Cocinar arroz es una tarea cotidiana para muchas personas, pero lograr un resultado perfecto no siempre es sencillo. También existen secretos o "trucos" para que no solo el sabor sea ideal, sino que también dure más una vez cocido.
Expertos en cocina y nutrición recomendaron un truco sencillo, pero efectivo: hay que añadir un ingrediente al agua de cocción, y no es la sal.
Se trata de vinagre, aunque puede parecer un detalle menor, esta técnica aporta múltiples beneficios, tanto en la preparación como en la conservación del alimento.
¿Por qué agregar vinagre al cocinar arroz?
El componente activo principal del vinagre es el ácido acético. Este compuesto no solo es responsable del sabor ácido característico, sino que también tiene propiedades antimicrobianas, antioxidantes y metabólicas.
La forma de cocinar un arroz perfecto.
Esto beneficia tanto a los alimentos como a la salud humana. Estos son los principales beneficios:
Mejora la textura y evita el apelmazamiento
Uno de los principales problemas al cocinar arroz es que los granos tienden a pegarse entre sí debido al almidón que liberan durante la cocción. El ácido acético actúa sobre las moléculas de almidón, retrasa su gelatinización y evita que los granos se adhieran.
Por lo tanto, el arroz cocido mantiene una textura más esponjosa, ligera y con los granos bien separados, lo que mejora su presentación y experiencia al paladar.
Extiende la vida útil del arroz
El vinagre también funciona como un conservante natural. Gracias a su capacidad para reducir el pH del medio, crea un entorno menos favorable para el desarrollo de bacterias y microorganismos que provocan el deterioro de los alimentos.
Esta base permite que el arroz cocido pueda conservarse en mejores condiciones por más tiempo.
Solo hay que agregar vinagre a la cocción.
Los beneficios nutricionales del vinagre, según la ciencia
La Escuela de Salud Pública de Harvard destacó varios efectos positivos del ácido acético en la salud metabólica. Entre los beneficios destacados se encuentran:
- Mejorar de la sensibilidad a la insulina: puede ayudar al cuerpo a utilizar la insulina de manera más eficiente, lo que favorece el control de los niveles de azúcar en sangre.
- Reducción de picos de glucosa: consumir alimentos con vinagre puede bajar los picos de glucosa postprandiales (después de las comidas), lo que es relevante para personas con diabetes o resistencia a la insulina.
- Sensación de saciedad prolongada: favorece una digestión más lenta y, por lo tanto, puede ayudar a prolongar la sensación de saciedad, contribuyendo al control del apetito y del peso corporal.