La Argentina y Sri Lanka, un solo corazón: esta vez el final de la historia debe ser diferente
Quien hubiera pensado que alguna vez la Argentina y Sri Lanka seguirían los mismos senderos económicos. La isla al sur de la India alberga a 24,5 millones de personas, con una economía basada mayormente en la agricultura (21% del PBI) y los servicios. La industria (19% del PBI) básicamente es textil, aceites vegetales, cerámica. En abril del 2022 el país entró en default tras una pérdida constante de reservas con un derrumbe del PBI y aumento de la pobreza. Argentinitis. Tuvo condimentos particulares como su excesivo endeudamiento con China y en marzo del 2023 debió acudir al FMI para su rescate. Dado su pequeño tamaño, Sri Lanka sólo tuvo que solicitar u$s 3.000 millones al organismo. Monedas.
Hoy Sri Lanka comenzó a estabilizarse y encarando reformas para que el crecimiento se mantenga con el paso de los años. Gita Gopinath, la número 2 del FMI y antes economista jefe, estuvo en las últimas horas en Sri Lanka, con reuniones con funcionarios. El contexto internacional impone desafíos más altos con la incertidumbre por la política económica de Estados Unidos y el conflicto en Medio Oriente.
Gita Gopinath. (Fuente: Archivo).
Desde su default, la recuperación de Sri Lanka fue notoria y en muy poco tiempo. Pasaron por largas filas para cargar nafta, escasez de bienes básicos, récord de inflación y cortes de energía. Argentinitis. Hoy la inflación está controlada y la economía creció 5% en el 2024. Hubo motosierra: en el frente fiscal, se ordenaron cuentas con aumento de la recaudación. Según resaltó Gopinath se fortaleció la estructura legal para luchar contra la corrupción. Recuérdese la contabilidad paralela en Argentina con el boom de fondos fiduciarios por fuera del presupuesto que eludían controles internos y externos.
El desafío para Argentina y Sri Lanka ahora es mantener el curso. No hay margen para errores de política económica, advirtió Gopinath. La elección es entre reformas o arrepentimientos. Entre construir reservas o arriesgarse a crisis futuras. Georgieva dixit.
En estas latitudes, las elecciones legislativas de octubre marcarán un antes y un después. En el gobierno sostienen que lo visto hasta ahora es nada frente a lo que se viene. El orden de las reformas es el siguiente: tributaria, laboral y previsional. Hay cambios necesarios. Uno es en el Fondo de Garantía de Sustentabilidad del Anses. Surgió con la estatización de las AFJP, con tenencias capturadas de cuentas individuales por el kirchnerismo. Acaba de renunciar el titular del FGS Manuel Calderón tras un paso fugaz. Quien decide allí es Cecilia Amor, allegada al titular del Anses, Fernando Bearzi. La ministra Pettovello tiene planeada una reforma en el FGS, entidad que adolece de inercia: quien toma una decisión de compra o venta de bonos es pasible de juicios. Mucho ruido donde se necesita silencio.
Argentina y Sri Lanka van por el mismo sendero. Gopinath sólo advierte porque no se caiga en la fatiga de reformas a mitad de camino.