La Justicia decidió sobre Cristina: ahora deberán acomodarse los demás actores de la política
La Justicia volvió a pronunciarse y ahora le toca a los demás acomodarse. Cristina Kirchner quedó detenida desde ayer en su departamento de Constitución, donde empezará a cumplir su condena de seis años por la causa Vialidad. Deberá usar tobillera electrónica y no podrá convertir su hogar en una sede paralela del PJ. El Tribunal Oral 2, que dictó la sentencia, le pidió que guarde un comportamiento respetuoso y limitó sus visitas. Bajo esas circunstancias, lo que veremos desde hoy es cómo reaccionan sus seguidores, el peronismo en general y el resto de la dirigencia política.
Aunque no tenga que presentarse en Comodoro Py, hoy el kirchnerismo (esencialmente La Cámpora y las organizaciones más militantes) igual hará catarsis en la calle. Tendrá la compañía de algunos gremios (no la CGT), pero no estará la protagonista, que todavía tiene chance de pedirle a sus fieles que no busquen confrontar contra las fuerzas de seguridad. Ahora, pasadas estas primeras jornadas, a lo que deberemos prestar atención es a la forma en que se paran los demás actores en el escenario de la política.
Axel Kicillof. (Fuente: archivo).
Dentro de tres semanas, el peronismo bonaerense y la unión que resulte entre La Libertad Avanza y el PRO deberán presentar las alianzas que competirán en las legislativas provinciales. Y para el 19 de julio, tendrán que estar los candidatos.
Sin Cristina en la lista, Axel Kicillof y Máximo Kirchner deberán consensuar una o más figuras de reemplazo. Si antes la campaña prometía ser una sucesión de "Che Milei", ahora el discurso no podrá evitar hablar de la "proscripción" que aplicó el Poder Judicial El gobernador prefiere que se muestre lo que hizo el Estado bonaerense en su gestión, pero sabe que en seguridad y obras la cuenta no va a cerrar ¿Alcanzará?
Libertarios y amarillos también tienen un desafío. Es probable que el modelo de alianza que gesten para Buenos Aires sea vuelva una referencia para otras provincias. Y si antes los contendientes de "la madre de todas las batalles" iban a ser Cristina y Milei, ahora ganarán relevancia los candidatos nominados, incluso para el peronismo. Porque en la elección de octubre, hay una sola lista y un distrito único. Pero en septiembre, más allá de que el PJ buscará sumar el total provincial (para hacer valer su poder en los distritos más poblados), el resultado será el fruto de una competencia en ocho secciones electorales. El aparato impondrá su peso en el sur bonaerense y La Matanza (donde iba a jugar Cristina), pero en la mayoría de ellas no tiene las de ganar.
El discurso del kirchnerismo es una promesa que mira al pasado. Milei necesita exprimir a fondo los resultados del presente, con precios a la baja y una reactivación que todavía no es para todos. Hable poco o hable mucho Cristina desde su ámbito de detención, esa será la carrera que se correrá en octubre: nostalgia versus inflación.