Sindicatos desafían a Sturzenegger y marchan a Desregulación: quiénes son, qué piden y cuál es el recorrido
Los números del INDEC mostraron un cambio de tendencia que preocupa a los dirigentes sindicales: la desocupación aumentó por primera vez desde que Javier Milei asumió la presidencia, marcando un punto de inflexión en un escenario donde los salarios -incluso con acuerdos paritarios- aún no logran compensar el impacto de la devaluación del 118% de diciembre de 2023.
El dato del desempleo llegó en un contexto donde la pérdida de poder adquisitivo se mantiene como una constante, pese a la desaceleración inflacionaria. Este panorama se agrava cuando gremios otrora combativos, como el de Camioneros, aceptan aumentos del 1% mensual, por debajo de la inflación acumulada.
Frente a esta realidad, un sector del sindicalismo no solo cuestiona al gobierno, sino también a las direcciones más tradicionales del movimiento obrero, en especial al núcleo duro de la CGT, señalado por su tibieza frente a lo que consideran un duro ajuste.
En ese clima entró en escena el Frente de Lucha por la Soberanía, el Trabajo Digno y los Salarios Justos, que agrupa a más de 150 organizaciones y convocó para este miércoles 25 de junio una movilización masiva hacia la sede del Ministerio de Desregulación que conduce Federico Sturzenegger.
La concentración comenzará a las 12 en Carlos Pellegrini y Sarmiento, desde donde marcharán hasta el edificio de Av. Roque Sáenz Peña 788, señalado como "símbolo de la entrega del país", anunciaron durante una conferencia de prensa en la sede de la Confederación Argentina de los Trabajadores del Transporte (CATT).
La decisión de movilizar ahora tiene un disparador inmediato: la publicación del decreto 340/2025, firmado por Sturzenegger, que modificó la Ley 25.877 y amplió el listado de actividades consideradas esenciales, limitando el derecho a huelga en sectores clave como educación, salud, transporte y telecomunicaciones. La norma obliga a garantizar entre un 50% y un 75% de los servicios en caso de conflicto, lo que fue interpretado como un intento de desactivar la capacidad de presión gremial.
Federico Sturzenegger, en la mira de los sindicalistas.
"El decreto es una avanzada contra los derechos laborales. Prácticamente prohíbe hacer huelgas", denunció el presidente de la Asociación Latinoamericana de Abogados Laboralistas, Matías Cremonte. En la misma línea, el investigador Luis Campos, del Instituto de Estudios y Formación de la CTA Autónoma, afirmó que "la ley pone casi en el mismo nivel un hospital que un bar".
A ese retroceso se suma otro paquete de medidas incluido en el mismo decreto, que afecta de lleno al sector del transporte marítimo. Se trata del nuevo Régimen de Excepción de la Marina Mercante, que habilita a operar bajo bandera extranjera, flexibiliza las condiciones laborales de la tripulación y facilita la competencia de buques internacionales en cabotaje. Para los gremios, esto implica un "golpe terminal" a la flota nacional y una "entrega sin precedentes" del control logístico del país.
Entre los reclamos de la movilización del miércoles se destacan el rechazo al tope del 1% en paritarias; la reincorporación de trabajadores despedidos; el cese de la persecución judicial y mediática a dirigentes gremiales y políticos; y la defensa de las empresas públicas, los recursos estratégicos y los bienes del Estado.
El comunicado del Frente marca el tono de la protesta: "Este Gobierno vino a destruir el Estado desde adentro. Gobernando por decreto, evade al Congreso, reprime la protesta, criminaliza la política y entrega nuestros recursos estratégicos", denunciaron. Y apuntaron directamente a Sturzenegger: "Es el ideólogo de un plan de saqueo que desmantela empresas públicas, flexibiliza derechos laborales y precariza la vida".
En el listado de organizaciones convocantes figuran gremios históricos como CATT, ATE, UOM, SUTEBA, UDOCBA y la Federación de Trabajadores Aceiteros; centrales como CTA Autónoma, CTA de los Trabajadores y la CGT Regional La Plata; movimientos sociales como UTEP y CCC; espacios estudiantiles como Estudiantes Evita, Movimiento Universitario de Izquierda y centros de estudiantes de distintas universidades nacionales; además de agrupaciones políticas como Lealtad Peronista, Peronismo por la Soberanía y el Foro por la Recuperación del Paraná.
Daniel Yofra, de Aceiteros, uno de los principales convocantes.
El Frente se constituyó a comienzos de junio como continuidad de experiencias previas de articulación gremial que fueron ganando visibilidad y músculo a medida que aumentaban las tensiones entre el gobierno y el movimiento obrero organizado.
Pero los antecedentes de este espacio se remontan a fines de 2023, cuando un grupo de gremios -entre ellos APJ Gas, Aceiteros, Bancarios, Luz y Fuerza Mar del Plata, Prensa Rosario, ATE y CTERA- se unió para rechazar la reinstauración del impuesto a las ganancias sobre los salarios. Desde entonces, ese entramado fue creciendo en densidad y volumen, con pronunciamientos cada vez más duros contra el gobierno y propuestas propias para un modelo alternativo.
Uno de los ejes recurrentes de esos pronunciamientos fue la crítica a la metodología oficial para medir la inflación, que según sus cálculos "subestimó un 15% el impacto real sobre los ingresos". También pusieron sobre la mesa el reclamo de un salario mínimo vital y móvil que permita cubrir la canasta familiar. "A fines de 2024, ese monto debía rondar los $1.900.000 brutos, muy por encima del salario mínimo oficial de entonces, que era de apenas $292.446", señalaron en su segundo comunicado, fechado en febrero de este año.