Dolor en el Vaticano | El papa León XIV habló sobre la guerra entre Irán e Israel y lanzó una advertencia: "Ninguna nación..."
La guerra entre Irán e Israel continúa escalando, y crece el temor de que el conflicto regional derive en una crisis global de consecuencias imprevisibles. Frente a este escenario, el papa León XIV expresó su dolor por la violencia desatada y lanzó un llamado urgente a los líderes mundiales.
Durante la Audiencia general celebrada en el Vaticano, el Sumo Pontífice se refirió directamente a la situación en Oriente Medio, instando a los responsables a "abrazar con determinación el camino del diálogo, de la diplomacia y de la paz".
Conmovido, advirtió que solo con responsabilidad política y voluntad de entendimiento será posible sanar "las laceraciones causadas por las acciones sangrientas de los últimos días".
Un llamado urgente para frenar la escalada del conflicto entre Irán e Israel
Las palabras del Papa resonaron con fuerza al citar al profeta Isaías: "Ninguna nación alzará más la espada contra ninguna nación, ni aprenderán más el arte de la guerra". Este versículo bíblico, dijo, resuena más que nunca ante los enfrentamientos que amenazan con extenderse más allá de las fronteras de Irán e Israel.
"Continuamos siguiendo con atención y esperanza la evolución de la situación en Irán, Israel y Palestina", afirmó el Pontífice. Su mensaje no fue solo un llamado al cese de hostilidades, sino una exhortación moral y espiritual a todos los responsables del conflicto para que escuchen "esta voz, que viene del Altísimo" y se esfuercen por construir puentes donde hoy hay muros.
Rechazar el odio y la venganza como respuesta
En su discurso, el Papa denunció la "lógica de la arrogancia y de la venganza" que domina actualmente el escenario geopolítico de Oriente Medio. Al mismo tiempo, renovó su súplica para que los gobiernos "elijan con determinación el camino del diálogo, de la diplomacia y de la paz".
Su intervención no solo estuvo cargada de preocupación, sino también de esperanza. León XIV aseguró que, a pesar del dolor, aún es posible detener la violencia. El Pontífice mostró confianza en que el frágil alto el fuego pueda sostenerse, con el apoyo de la comunidad internacional y un compromiso real de las partes involucradas.
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Conmoción por el atentado en Siria
Además del conflicto entre Irán e Israel, el papa León XIV dedicó palabras de consuelo y firme condena al reciente atentado terrorista contra la comunidad greco-ortodoxa en la iglesia de Mar Elías, en Damasco, que dejó al menos 30 muertos y más de 60 heridos.
"Encomendamos las víctimas a la misericordia de Dios y elevamos nuestras oraciones por los heridos y sus familias. A los cristianos de Oriente Medio les digo: estoy cerca de ustedes, toda la Iglesia está cerca de ustedes", declaró el Papa.
Este "vil ataque" reabrió heridas profundas en un país golpeado por años de guerra civil. Para León XIV, "este trágico acontecimiento recuerda la profunda fragilidad que aún afecta a Siria, después de años de conflicto e inestabilidad".
En este contexto, el Papa también dirigió un mensaje a los líderes del mundo, a quienes instó a no desentenderse de la tragedia que atraviesan millones de personas en Medio Oriente. "Es esencial que la comunidad internacional no aparte la mirada de este país, sino que siga ofreciéndole su apoyo con gestos de solidaridad y con un renovado compromiso por la paz y la reconciliación", afirmó.