«Se te va a pasar el arroz». Esta es una de las frases más recurrentes que escuchan las mujeres que superan la treintena, especialmente si cumplen con los «requisitos» que la sociedad considera ideales: tener pareja, un empleo estable, una vivienda y, en general, el equilibrio necesario para pensar en formar una familia. Sin embargo, para muchas mujeres, estas presiones externas son una carga. Así lo sintió Ángeles García, madre de Mateo a los 31 años: «La sociedad siempre quiere marcar los ritmos de nuestra vida. Te indican cuándo es o no es el momento idóneo».