Entre el fragor de una gran avenida como es Alfonso el Sabio y el tumulto turístico del Castillo de Santa Bárbara permanece escondida una joya para los más futboleros de la ciudad. El campo de fútbol sala con mejores vistas de Alicante es el único que existe en la zona centro y su radiante singularidad choca con el desconocimiento de los alicantinos de su existencia.