El Gobierno lanza un plan especial para combatir las estafas de suplantación de identidad por teléfono y SMS
La estrategia incluye cinco medidas específicas para dificultar este tipo de ataques, como la prohibición de utilizar números de móvil para llamadas comerciales
Frena la sensación de urgencia: así hackean tu mente los ciberestafadores y los trucos para evitarlo
El Gobierno ha sacado este martes a consulta pública un plan especial con cinco medidas para combatir las estafas de suplantación de identidad. El Ministerio para la Transformación Digital apunta la necesidad de “aumentar la protección de consumidores y empresas ante el creciente número de fraudes a través de este tipo de estafas”, en las que los atacantes se hacen pasar por familiares, por organismos públicos o por empresas privadas como bancos para engañar a las víctimas.
Las fuerzas de seguridad han informado que los cibertimadores están refinando cada vez más sus tácticas y emplean ya técnicas avanzadas como la clonación de voz con herramientas de inteligencia artificial. Las cinco propuestas de Transformación Digital tienen como objetivo dificultar que los estafadores puedan llegar a comunicarse con los ciudadanos ocultando que están llamando o escribiendo desde números localizados en el extranjero, o bien utilizando números de móvil falsificados.
De esta forma, la primera que cita el Ministerio es el “bloqueo por parte de los operadores de las llamadas que utilizan números que no hayan sido atribuidos a ningún servicio, asignados a ningún operador o adjudicados a ningún cliente”. Se trata de números virtuales que los ciberdelincuentes generan con servicios de telefonía digital que dificultan su rastreo cuando su víctima denuncia.
La segunda tiene que ver con “uno de los focos de fraude más habitual”, señala el Ministerio, y es el “bloqueo por parte de los operadores de llamadas y SMS de numeración nacional, pero con origen internacional”. De esta forma los atacantes consiguen que la numeración internacional real que están utilizando quede oculta y no levante sospechas en su objetivo cuando lo ve en la pantalla de su móvil.
La tercera es la “creación de una base de datos, que gestionará la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia, con los usuarios que utilizan alfanuméricos en sus mensajes (por ejemplo, el nombre de la compañía)”. Es una suplantación que sufren muy a menudo los bancos y las empresas de paquetería, que ven como los ciberdelincuentes consiguen enviar SMS a sus clientes que van a la misma línea de mensajes que ellos habían utilizado en sus comunicaciones reales anteriores. “Aquellos mensajes procedentes de entidades no incluidas en esta base de datos quedarán bloqueados”, asevera Transformación Digital.
Por último, el Gobierno decretará la prohibición de utilizar números de móvil para realizar llamadas comerciales, “de forma que la ciudadanía pueda detectar que es un fraude si reciben una llamada desde una numeración de este tipo”. “Además, se permitirá con carácter general la utilización de números 800 y 900 por parte de las entidades que tengan asignados estos números para la realización de llamadas comerciales, de forma que, si un usuario tiene un número 800 o 900 guardado en su agenda como el servicio de atención de una empresa de la que es cliente, le aparezca como tal cuando ésta le llame para realizar una oferta comercial”, añade.
El plan entra ahora en una fase de consulta pública en la que los diferentes actores interesados, así como los ciudadanos, pueden hacer sugerencias o declaraciones. Estará abierto hasta el 15 de septiembre. El Ejecutivo resalta que medidas como estas se han puesto en marcha en países europeos como Finlandia, donde “se han reducido las estafas por suplantación de identidad en casi un 90%”.