Desafíos de altura: las rutas de senderismo por pasarelas más espectaculares de España

España es un paraíso para los amantes del senderismo, con paisajes que abarcan desde verdes bosques hasta áridos desiertos, y desde altas montañas hasta profundos valles. Hay senderos de todo tipo. Pero dentro de esta gran variedad de rutas, hay un tipo que destaca por su espectacularidad y capacidad para llevarnos a lugares que parecen imposibles: las rutas con pasarelas. Cuando no hay camino, hay que hacerlo de forma artificial, y estas estructuras permiten cruzar zonas complicadas, como cañones, ríos y desfiladeros, ofreciendo vistas impresionantes y una experiencia única de contacto directo con la naturaleza.

Seguro que te sonará el famoso Caminito del Rey, en Málaga, conocido por sus vertiginosas pasarelas suspendidas en altos acantilados. Pero España tiene mucho más que ofrecer: desde Huesca hasta Alicante, pasando por Granada y Burgos, estas rutas combinan aventura, historia y paisajes de todo tipo. Pero eso sí, toma nota porque algunos de estos senderos no son aptos para quienes padecen de acrofobia.

El Caminito del Rey, Málaga

El Caminito del Rey es una de las rutas más icónicas y espectaculares de España. Este sendero atraviesa el Desfiladero de los Gaitanes mediante pasarelas ancladas a la pared a más de 100 metros de altura. Originalmente construido a principios del siglo XX como un acceso para los trabajadores de la Sociedad Hidroeléctrica del Chorro, fue rehabilitado y reabierto al público en 2015. Desde entonces, se ha convertido en un reclamo turístico de primer orden, con millones de visitantes atraídos por su historia y sus vistas de vértigo.

El recorrido, de 7,7 kilómetros, combina senderos y pasarelas, siendo el tramo más famoso el que cruza el desfiladero. Si las pasarelas ancladas a las paredes te parecen poco, la experiencia incluye un gran puente colgante que desafía a los más temerosos mientras ofrece unas espectaculares vistas de la garganta del río Guadalhorce. Además de la belleza paisajística, el Caminito del Rey es un enclave importante para la observación de aves como buitres leonados, por lo que no debemos olvidar mirar también hacia arriba de vez en cuando.

Desfiladero de La Yecla, Burgos

El Desfiladero de La Yecla, situado en la Sierra de la Demanda, es uno de los cañones más estrechos de España, con una longitud de 600 metros y una anchura que en algunos puntos no supera los dos metros. Este paso angosto ha sido esculpido por el arroyo Cauce a lo largo de miles de años, y su recorrido es posible gracias a una serie de pasarelas y puentes instalados sobre el río. Las altas paredes de roca caliza ofrecen una experiencia sobrecogedora y perfecta para realizar en familia o con amigos.

El entorno forma parte del Parque Natural Sabinares del Arlanza-La Yecla, un espacio protegido que alberga uno de los sabinares más antiguos del mundo. Además, en la zona se pueden avistar numerosas aves rapaces, como buitres leonados, águilas perdiceras y halcones peregrinos. La visita al desfiladero puede complementarse con un recorrido por los pueblos cercanos, como Covarrubias o el Monasterio de Silos, que enriquecen la experiencia cultural y natural.

Pasarelas de Montfalcó, Huesca

La ruta de las Pasarelas de Montfalcó es una de las más llamativas de la península ibérica. Este recorrido une las provincias de Huesca y Lleida mediante puentes colgantes y pasarelas de madera ancladas a la roca, ofreciendo vistas espectaculares del desfiladero de Mont-rebei y del embalse de Canelles. La ruta comienza en el antiguo pueblo de Montfalcó y discurre por paisajes agrestes que dejan sin aliento.

Uno de los momentos más impactantes es el segundo tramo de escaleras, que salva un desnivel de 50 metros de altura y ofrece una panorámica única del Congost de Siegué. La ruta, de 8 kilómetros de ida, puede extenderse hasta 17 kilómetros si se realiza el trayecto de vuelta a pie. Es una experiencia que combina historia, naturaleza y aventura, ideal para senderistas experimentados.

Pasarelas del río Mao, Ourense

Situadas en la Ribeira Sacra, las Pasarelas del río Mao ofrecen un recorrido espectacular entre bosques y viñedos gallegos. La ruta comienza en la Fábrica da Luz, una antigua central eléctrica reconvertida en albergue, y sigue el cañón del río Mao hasta su desembocadura en el río Sil. Las pasarelas de madera permiten abrirse paso por la maleza y disfrutar de impresionantes vistas del valle mientras se camina en contacto directo con la naturaleza.

El recorrido está salpicado de miradores y paneles interpretativos que explican la biodiversidad de la zona, enriqueciendo así la experiencia a nuestro paso. Las aguas cristalinas del río, junto con el sonido de las cascadas, crean un ambiente mágico que invita a la calma y la desconexión en una ruta accesible y perfecta para hacer también con niños.

Ruta del río Borosa, Jaén

La ruta del río Borosa, en el Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas, es una de las más populares de Andalucía. Este recorrido de 21 kilómetros (ida y vuelta) sigue el curso del río Borosa y atraviesa paisajes que nos llevan por pozas turquesas, cascadas y frondosos pinares. Uno de los tramos más llamativos es la Cerrada de Elías, un estrecho desfiladero que se cruza mediante pasarelas de madera.

Durante el recorrido, es posible avistar numerosas especies de fauna local, como el martín pescador o un reptil endémico del parque natural: la lagartija de Valverde. La ruta, de dificultad media, puede realizarse en unas seis o siete horas, aunque si te conformas con llegar a la Cerrada de Elías y volver, te llevará solo unos 8 km en total. Sin duda, es una de las mejores maneras de descubrir la riqueza natural de la provincia de Jaén.

Ruta de los Pantaneros, Chulilla

La Ruta de los Pantaneros, en Valencia, sigue el cauce del río Turia y ofrece impresionantes vistas de los cañones que ha esculpido el agua a lo largo de los siglos. El recorrido de 15 kilómetros incluye el cruce de dos puentes colgantes y pasa por lugares emblemáticos como Los Calderones y el Charco Azul.

Este sendero histórico sigue el camino que utilizaban los trabajadores que construyeron el embalse de Loriguilla en los años 50. Además de la belleza natural, la ruta ofrece un viaje al pasado, conectándonos con la interesante historia de la región. Es una experiencia perfecta para quienes buscan aventura y contacto con la naturaleza.

Sendero de la Cerrada del Río Castril, Granada

La Cerrada del Río Castril, en Granada, es un recorrido corto pero espectacular que discurre sobre pasarelas de madera y que incluye un espectacular puente colgante de 70 metros. El sendero sigue el curso del río Castril, permitiendo que nos adentremos con toda la comodidad por un estrecho cañón que, si no fuera de esta forma, no podríamos disfrutar con niños.

El punto de partida es el pueblo de Castril, que cautiva con sus casitas blancas, y la ruta incluye un túnel excavado en la roca con una apertura que nos permitirá disfrutar del salto del agua. La Cerrada del Río Castril es una experiencia apta para todas las edades y perfecta para quienes buscan descubrir uno de los parajes naturales de mayor belleza de la provincia de Granada.

Ruta del barranco de la Hoz, Teruel

La ruta del barranco de la Hoz, en la Sierra de Albarracín, es una de las más espectaculares de la provincia. El recorrido, de 8 kilómetros, atraviesa puentes colgantes y pasarelas que permiten adentrarse en cañones y acantilados de gran belleza. Une los pueblos de Calomarde y Frías de Albarracín, a través del Cañón del Río Blanco, y puedes hacerla en los dos sentidos. Si no fuera por las pasarelas metálicas que nos permiten pasar sobre el río, sería imposible completarla.

Además del atractivo paisajístico, la ruta destaca por su fauna, con numerosas parejas de buitres anidando en las paredes rocosas. La ruta es apta para diferentes edades y ofrece la posibilidad de descubrir otros lugares cercanos, como la cascada de Calomarde. La baja dificultad de la ruta permite llevarla a cabo con niños. 

Pasarela de la Presa de Relleu, Alicante

Las pasarelas del Pantano de Relleu ofrecen una experiencia singular en la provincia de Alicante. Este recorrido de tablones de madera, que desafía la gravedad al estar anclado a la pared del desfiladero, ofrece maravillosas vistas del entorno natural. La pasarela se encuentra suspendida a unos 60 metros de altura y recorre unos 850 metros entre ida y vuelta.

Parte del itinerario se realiza por un antiguo camino de herradura que ha sido recuperado del olvido: el Camí de les Ripalmes o del Fasamais. En el trayecto, los visitantes podrán ver antiguas balsas de riego, acequias y un horno de cal, lo que convierte a esta ruta en una perfecta combinación de naturaleza e historia. Además, es posible visitar el pantano de Relleu, una construcción del siglo XVII.

Ruta de las pasarelas de Alquézar, Huesca

La Ruta de las Pasarelas de Alquézar es una de las más pintorescas de los Pirineos aragoneses. El recorrido sigue el último tramo del cañón del río Vero y ofrece una combinación perfecta de agua, roca e historia. Las pasarelas, perfectamente seguras, permiten disfrutar de este singular enclave natural sin ninguna dificultad.

La ruta parte de la Plaza Mayor de Alquézar y desciende por unas pasarelas de madera que se adentran en el cañón. En el trayecto, los visitantes pueden visitar la Cueva de Picamartillo y la antigua central hidroeléctrica de Alquézar. La ruta también incluye miradores con vistas espectaculares del cañón y del propio pueblo de Alquézar.

Ruta de las pasarelas del desfiladero de los Hocinos, Burgos

La Ruta de las Pasarelas del Desfiladero de los Hocinos, en Burgos, es un recorrido que forma parte del Camino Natural del Ebro (GR-99). Esta ruta, de unos 7 kilómetros ida y vuelta, es ideal para disfrutar con niños, ya que es de fácil acceso y permite a todos disfrutar de la belleza del cañón del río Ebro.

El recorrido incluye dos pasarelas colgantes que permiten seguir las formaciones rocosas a través del desfiladero, quedando sobre nuestras cabezas el vuelo de aves rapaces como águilas perdiceras, buitres y alimoches. El punto de inicio es el puente denominado Puente del Aire, desde donde se sigue un sendero que discurre junto al río entre bosques de encinas, hayas y robles.

Pasarelas de Panticosa, Huesca

Las Pasarelas de Panticosa, sobre el río Caldarés, son una ruta accesible que combina naturaleza y aventura. Este recorrido, de aproximadamente 1,5 kilómetros, permite adentrarse en el congosto y disfrutar de vistas impresionantes de las badinas y pozas que el río ha esculpido a lo largo del tiempo.

El recorrido comienza en el aparcamiento de la estación de esquí de Panticosa y sigue un sendero señalizado hasta las pasarelas. Desde allí, los visitantes pueden continuar hasta el Mirador O Calvé, y por el camino se pueden visitar los vestigios de la Línea P, dos búnkeres, construidos tras la Guerra Civil española. La ruta es ideal para realizar con niños y se puede completar en una hora y media aproximadamente.